Tu me darás la vida. Reeditada

19. ¿Qué hago?

Duermo unas cuantas horas mas y me despierto, no está Ray, doy por hecho que estará haciendo los últimos preparativos.

-¡Buenos días Jud! -me habla Clara, demasiado tranquila está.

-Buenos días... ¿Y todo el mundo? -pregunto.

-No están. Ya sabes... preparativos y todo eso. ¿Que has pensado hacer hoy?

-Quería ir con Lidia a pasear por el campo. ¿Donde esta? -su cambia cara.

-¿Acaso quieres a Lidia? Es mía. -se pone agresiva.

-Es mi amiga, nada mas... -doy unos pasos atrás. -No hace falta que te pongas así.

-¿Entonces por qué quieres ir con ella a ese campo? -me pregunta.

-Solo quiero respirar paz... -le digo tranquilamente. -Lidia está coladita por ti, y no me gustan las chicas. -le digo preparándome un vaso de leche.

-¿Segura? -me dice , está siguiéndome.

-Si. La que debería estar así sería ella, te pilló con otra. -le digo para que se calle.

-¿Como te atreves? -me tira el vaso de leche al suelo.

-Paso de ti Clara, tan celosa que eres y tu, la primera que le es infiel. -le digo limpiando su desastre.

-¡No era lo que parecía!Esa chica se me lazó. -me coge del cuello.

-¡Suéltala ahora mismo! -aparece Lidia, está un poco mal.

-¿Lidia!¿Puedes decirme donde estabas? -le pregunta Clara.

-A ti no te importa. Deja en paz a Jud. Ella es mi amiga, nada más. -me mira. -Nos vamos, quiero enseñarte algo. -me dice.

-Tu no te vas. -aparece de repente delante nuestra, enfurecida.

-Claro que si. -le aparta Lidia. -Es mi amiga, y te ha dicho lo que vamos a hacer. Más controlada que eso no puedes tenerme. No soy como tu. -le quiere hacer daño. -Que me voy con la primera a la que veo.

-¡Es una maldita niñata que me persigue! -dice Clara en su defensa.

-Dime quien es, y la mato. -le dice Lidia seria. -¡Dímelo!

-Pobre chiquilla... -dice Clara con compasión. -Solo tiene 18 años...

-Esa es la edad que yo tenía cuando me metiste en esta mierda de mundo. ¡Mataste a un chico porque solo quería quedar conmigo para hacer un trabajo!Pero claro... esa chiquilla de 18 años te da pena. -le dice Lidia, nunca la había visto así.

-Lid... -le corta.

-Vete a la mierda Clara. -le contesta. -Me metiste aquí solo por capricho. Dices que me quieres, solo quieres que sea tuya, no puedo tocar a nadie, pero tu si. No es justo.

-¡Vuelve aquí ahora mismo! -le dice Clara.

-¿Si no que?¿Vas a darme unos azotes?Que miedo... ¡Como si no estuviese acostumbrada! -pega portazo.

Nos vamos de esa casa, es de locos como está la situación últimamente.

-¿Estás bien Jud? Siento mucho la escenita... -se disculpa.

-No te preocupes. Estás en tu derecho. Yo lo haría también. -le contesto. -¿Que has pensado hoy?

-Tenemos que estar aquí... -mira el reloj. -A las seis. ¡Prepárate! -me dice emocionada.

Por la mañana fuimos de compras, tomamos batido, galletas helado, es decir, me ceba mucho.

-Vamos Jud, te veo muy lenta... -me dice.