Capítulo cuarenta

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Bellamy

La ruidosa alarma me despertó.
La apagué y luego me restregé los ojos con somnolencia para poder safarme de la pereza.

- Miren quién despertó - Octavia se asomó a la puerta con una pícara sonrisa en sus labios.

- Hola, O - exclamé aún casi dormido.

- ¿Qué tal dormiste, Bell? - entró a mi cuarto y se sentó en la cama junto a mí.

Todavía no me había percatado de lo hermosa qué lucia mi hermana. Vestía una jardinera de cuero sintético, junto con unos tacones altos de patente.

- Estás hermosa - pensé en voz alta.

- Bell, basta; qué haces qué me sonroje -dijo haciendo brillar su sonrisa.
Le lancé una mirada llena de orgullo. -Vamos, ve a vestirte - me sugirió.

-Lo que tu digas - salté de la cama.

- Grita cuando estés listo - salió de mi habitación con una gran sonrisa entre sus labios. Se le notaba a kilómetros qué estaba empapada en felicidad

- Cómo sea - me metí al baño.

~♡~

Clarke

El sol qué entraba por mi ventana, molestó mis ojos bruscamente. Sabía perfectamente qué había pasado ayer,  y me siento terrible por ello.

La sensación de culpabilidad me invadía en grandes cantidades, sin saber por qué.

Estaba desnuda bajo mis sábanas, y no pude sentir el calor de nadie detrás de mí.

Maldito infeliz.

Solo vino a mi casa para poder acostarse conmigo, qué bien qué ya logró su objetivo.

Me volteé bruscamente y había una nota junto a mí. 

"Lo siento, princesa. Tuve qué irme temprano. Espero qué ésta maravillosa noche se vuelva a repetir.

Te amo.

Finn"

Imbécil.

Rompí la pequeña note en mínimos pedazos y me crucé de brazos.
Un gran destello se cruzó por mi mente. Claro, el minino qué dormía en casa.

Me coloqué mi pijama y salí a la sala rápidamente.

El felino estaba mucho mejor hoy.
Acaricié su lomo con delicadeza, haciéndolo ronronear. Se veía más feliz, más sano, más vigoroso.

Tomé mi teléfono y tenía una llamada pérdida de Bellamy. Lo primero qué se me vino a la mente fué devolverle la llamada, lógicamente.

Le marqué y me coloqué el teléfono en la oreja, esperando cada timbre con impaciencia, esperando una simple respuesta.

Lástima qué, no respondió.

Éso fué un golpe más para mi  destruido corazón. Me siento mucho peor ahora.
Siento qué... Yo soy la qué voy destruyendo corazones por ahí.

Me tiré en el sofá, ahogada en mis pensamientos, como siempre.

(...)

~♡~

Bellamy

Ya estaba listo para la graduación, pero algo no podía dejar de fastidiarme.
¿Qué demonios pasa con Clarke?- me pregunté a mi mismo.
Parece qué no desea saber nada de mí. No quiero pensar cosa estúpidas, pero algo está mal.

-¿Bell? ¿Ya estás listo? -Octavia volvió a asomarse con curiosidad.

- Si, bajo en un momento - exclamé, fingiendo arreglar mi corbata.

Por curiosidad, volví a revisar mi teléfono. Una llamada pérdida de Clarke Griffin.

Pues claro que la llamé de vuelta.

Esperé con ansias escuchar el sonido de su voz. Luego de unos cinco tonos, decidió coger el teléfono. Pero no escuché su voz.

-¿Clarke? - tragué fuertemente con ansiedad.

- ¿Bellamy? - Clarke estaba llorando, podía sentirlo. Su voz se oía tosca.

-¿Estás bien? - fué lo único qué sé ocurrió decir.

- Si, muy bien. Diría excelente - Dios, ella  misma sabía qué mentía. - Así qué, ¿Con quién irás a la fiesta de graduación? - oí como fingía interés en ése tema.

- Iría contigo, pero... estás a trescientos kilómetros de mí.

-Es cierto. Es una lástima. Hubiera  bailado contigo hasta qué mis doliera - sabía qué estaba sonriendo, lo cuál me hizo sonreír a mí. -¿Con quién irás?  Ésta vez, qué sea en serio - exigió con ligera firmeza.

-  Con Echo - dije no muy alegre al respecto.

- Genial-  Era obvio qué sentía celos.

-Alguien está celosa - reí de manera pícara.

- No estoy celosa, es solo qué... Ella es muy afortunada. Tiene al mejor chico qué existe, para ella sola - me regocijé de ternura.  -Claro, por está noche nada más -aclaró riendo entre dientes.

- Cómo tú quieras, princesa - mordí mi labio inferior con picardía.

- ¡Bellamy! - Octavia me espantó.

Le lancé una mirada asesina.  Es increíble su grado de molestia.

- ¿Estás hablando con Clarke? ¿Cierto

- No, estoy charlando con Lincoln.

- ¿¡QUÉ!? ¡CUELGA ÉSE MALDITO TELÉFONO! - Gritó.

- Estoy hablando con Clarke, tonta -oía a Clarke soltar una carcajada burlona.

- Ve, pecas - dijo con firmeza.

- Claro, como sea - le dije un tanto frío.

-Te... Te amo - exclamó un tanto tímida.

- Yo también te amo - dije antes de colgar el teléfono. Octavia estaba paralizada. Como si le sorprendiera.

-No puedo creerlo. Eso fue muy tierno - lanzó las palabras de manera sincera.

Estiré mis labios y salimos de mi habitación.

(...)

~♡~
¿Mejor? ¿Ya no me odian?
Bueno, disfrútenlo.

Con amor, Ivs

You're my gravity [B,B; C,G]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora