Junto con esta historia, una parte muy importante de mi vida ha sido entregada. Lágrimas, risas y recuerdos son plasmados en estas cartas. He abierto un rincón de mi alma ante ustedes, mi corazón y mi mente han sido expuestos y llegar al final me pone muy sentimental. Como escritora (si es que tengo el privilegio de llamarme así) las palabras son un arma poderosa para la libre expresión. No soy una persona muy social ni segura; sin embargo, cada vez que me siento con las teclas bajo mis manos, sé que estoy en mi hogar, al único al que pertenezco en su totalidad.
Gran parte de mis relatos, posee una historia detrás. Ruta 93: el último adiós, no es la excepción.
El aprecio que le tengo a mis lectores es muy grande y es por ello que no les privaré conocer la verdad que me inspiró a escribir esto.
Así como Hylie, yo también tuve un mejor amigo que dejó mi vida marcada por siempre. Apareció en mi camino sin ninguna advertencia y yo, maravillada por su presencia, lo dejé acompañarme. De haber sabido que se marcharía tan pronto, sin motivo, ni despedidas, todo hubiera sido distinto, pero de haber sido así, mi vida a como la conozco hoy no tendría sentido.
¿Cómo puedes olvidar a alguien a quien amas tanto? ¿Cómo puedes pretender que nunca existió?
Por mucho tiempo, busqué mil y un formas de deshacerme de un terrible sentimiento de culpabilidad que habitaba en mí, pero con el tiempo, nada servía, mi progreso se acababa. Así que decidí recurrir a mi salvación: el papel y la pluma. Creí que si escribía todas aquellas preguntas, recuerdos y emociones al pensar en su persona, podría superarlo todo. Sería mi terapia y cuando estuviera mejor, todo terminaría.
El final de esta historia no es como pensé escribirlo en un principio, mas es justo lo que necesitaba. No puedo imaginar a Hylie y Agustín de otra manera. Hay ciertas situaciones en la vida que nunca terminarán como lo planeamos, a veces eso será bueno, pero cuando no lo sea así, no podemos estancarnos y reprochar por ello.
He terminado esto mucho más fuerte de lo que imaginé y además complacida por la historia que he creado.
Las fantasías son hermosas, pero tan efímeras que, cuando llega el momento de despertar, no hay nada que se pueda hacer al respecto.
Ésta no solo es la historia que más rápido he terminado, sino de la que más orgullosa me siento al momento. Reconozco que tengo muchos errores, pero prometo mejorar en el camino.
Si se presentara alguna duda sobre la historia, siéntete libre por preguntar.
Gracias por leer ❤.
-Hannie 🌸
ESTÁS LEYENDO
Ruta 133: el último adiós | Terminada |
Short StoryPrimer lugar, premios Chicos tinieblas 2019. ☆☆☆ Fuego y gasolina. Hielo y combustión. El universo los creó juntos, las galaxias cuidaron de su luz, pero una inesperada explosión cósmica, les arrebató el estrecho destino que lograron construir. ☆☆☆ ...