TE DESEO SUERTE

No te creo

Tenía que concentrarme no dejaría que esto cambiara la desconfianza que le tenía Tobías. Me desperté a las 6:50 am. No poda dormir en toda la noche, desde que pegue el grito no quise volver dormir. Oí un bostezó... Tobías ya estaba despierto. Me volteo a ver aún seguía con las cobijas que tenían un olor a colonia tal vez de el.

- No dormiste- me dijo mirándome a los ojos desde el tapete, aún con el pelo alborotado era atractivo.

- Claro que dormí que tenga cara de muerta por la mañana no es mi culpa- mentí.

-No, no tienes cara de muerta- dijo esbozando una media sonrisa- es sólo que te estuve vigilando... tampoco dormí.

- Por que me vigilabas?

- Sólo me aseguraba de que estuvieras bien- su respuesta me sorprendió y la manera en que lo dijo.. Era tierno.

- Estoy bien deberías dormir- le dije acomodando me en las sábanas.

- Tú deberías dormir- dijo riéndose al momento en que lo dijo.- puedo hacerte una pregunta?

- Adelante- dije

- Que fue lo que soñaste?- dijo serio

- Am..m sólo soñé mal no recuerdo bien - mentí

Me miro sospechoso sabría que mentí?

- No te creo- dijo en tono victorioso

- Como?! Te estoy diciendo la verdad!- solté tenía que mentir mejor.

- Que no te creo- dijo acercándose más a mi por unos sentí metros mirándome a los ojos, odio cuando hace eso.

Tobías Se sentó en el borde de la cama.

- Pero sabes que?no importa, tarde o temprano me lo dirás tú misma..- cómo podía decir eso??

- como estas tan seguro?- le pregunte molesta.

- Lo aras- dijo seguro y se metió al baño. Nunca iba a decirle, no tenía por que.

Cuando salió ya estaba cambiado y no podía creerlo tenía la camiseta de I am sexi puesta con una chaqueta café encima como aún rayos le quedaba?! No me aguante y me reí.

- Que es tan gracioso?- dijo secándose el cabello con una toalla.

- Nada es sólo que no puedo creer que aún te quede.. - dije riendo

- Esto- dijo apuntando hacia su pecho donde estaba escritas las letras- Siempre fue cómoda, la mande hacer la antigua ya estaba gastada- se me quedo viendo un rato sin moverse.

- Que?- le dije parando de reír- porque me miras así?

- Me gusta verte reír- dijo esbozando una sonoriza- a demás has cambiado ya no eres la niña que conocí Sam- dijo en un tono más serio.

- Pues también has cambiado tú- dije sonriendo.

- No te creo- dijo en tono burlón empezaba a preocuparme tenía que aprender a odiarlo más.