Mi nuevo cuarto

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TOBÍAS

Mire a Taylor esperanzado, por más que le daba vueltas al asunto no lograba entender que Sam, mi Sam tubierá unos tíos y que se la hayan llevado de vuelta al lugar en donde de que ella no será feliz, tan sólo de pensar que sus recuerdos la lastimen más de la cuenta me deja con dolor de estómago, sin pensarlo más agarré el teléfono y le marqué, nunca pensé que los tonos de espera pudieran ser tan infinitos hasta que me contestó.

- Hola?- dijo parecía más un hola para un funeral.

- ¿Por qué ?- dije se que ella suspiró del otro lado del auricular.

- No vengas- dijo adivinando mis intenciones, creo que me conoce más de lo que esperaba.

- No has contestado mi pregunta- dije

- Quiero hacerlo sola Tobías, me sentiré mal haya pero no tenía otra opción, se que puedo y no quiero lastimarte, no quiero que vengas- dijo, pude notar que estaba llorando no pude más.

- Lastimarme? Bien. No iré de acuerdo quédate tranquila lo prometo- dije más para ella que para mí.

- Ok, te amo- dijo y pude sentir unas ganas inmensas de besarla.

- Te deseo suerte Sam y también te amo- dije y ella colgó. Mire a Taylor y sonreí el sin entender se me quedo mirando.

- Sabias que las promesas son sólo palabras que ocultan la realidad de los sentimientos?- dije mirando a Taylor y el sólo sonrió.

- Iré a hacer mi maleta- dijo y yo me salí de la casa, también tenía que empacar por que si algo se que tenemos en común Sam y yo es que somos verdaderamente tercos pero eso nos te confronta.

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SAM:

Me limpie las lágrimas como pude y decidí volverme fuerte para cuando quisiera llorar ya que mi Tía no soportaba según ella mis " Berrinches".

Estaba en la parte de atrás del auto, y una persona que no conozco estaba manejando, supongo que ha de ser el chofer o algo así, mis tíos estaba sentados delante de mí y mi prima a lado este iba a ser un viaje muy largo..

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Después de escuchar música hasta que me dolió la cabeza, dormir hasta que se me quitó el poco cansancio que tenía y ver hacia la ventana hasta que me grabe el paisaje, llegamos a una mansión que en mi opinión era la más elegante que he visto.. Lo odio, odió lo demasiado elegante y lo demasiado glamuroso me daban ganas de vomitar, la casa estaba rodeada por una gran cantidad de terreno, es césped estaba cortado a la perfección y los arbustos estaban cortados en forma redonda de una manera que quedaba a la perfección con el diseño del jardín y por supuesto una gran fuente el medio del terreno. Genial.

Mi tía bajo del auto y respiro hondo.

- Lo ves Sam, no podrías pedir nada mejor- yo rodee los ojos desde dentro del auto, mi tío bajo y camino hacia la casa, mi prima bajo primero y después yo no sin antes golpearme la frente con la puerta ya que la muy canija me la lanzó como si no hubiera nadie más en el auto, si no fuera por mi control interior le hubiera roto los dientes en ese momento.

- Bien- dijo mi tía cundo salimos todo del auto y el chofer se fue- dormirás ahí- dijo señalando una casita que al parecer es como un cuarto de visitas estaba en el jardín de la derecha , era muy mona de no ser por la suciedad que la cubría, diría que el Titanic al fondo del mar estaba más limpio, sabía que mis tíos me odiaban pero dentro de su casa me imagino que debe haber más una habitación donde yo pudiera dormir, pero esto, esto era odió nivel experto, mire a mí tía y no se porque tuve la esperanza de que fuera una broma pero como siempre, no.

No dije nada simplemente camine hacia la casita abrí la puerta, lo que faltaba ni cama tenía. Volteé.

- No hay cama- dije volteando de nuevo.

- Eso ya lo se, tú tío mandara traer unas cobijas para ti y unas almohadas- dijo dando la vuelta para irse yo trataba de contar hasta diez. Esto iba a ser muy difícil.

Me metí como pude por que la puerta estaba atascada con el pasto y otras hierbas que tenía al rededor empece por quitarlas una por una y con mis manos ya que no tenía nada a la mano no a la vista con que quitarlo, me espine los nudillos y tenía rasguños por todos lados en las manos. Una vez quitado pude abrir la endemoniada puerta y meterme era no más grande que mi baño y tenía una repisa de madera pegada a la pared, bueno tendré que hacer del baño en el hermoso jardín de mis tíos pensé, a mi alrededor parece haber cajas llenas de polvo y cosas que por lo que veo fueron olvidando.

Empece por quitar las cajas de en medio y hacer un perímetro en la habitación con ellas, abrí la ventanilla que estaba en el techo, era lo único que me gustaba de aquel lugarcito porque podía ver el cielo y las estrellas que era una de las cosas que siempre me ha gustado hacer. Estaba por limpiar aquella repisa cuando la puerta se abrió .

- Puedo pasar señorita?- dijo una mujer que por su voz era joven.

- Si, claro- dije haciéndole una señal para que entrara.

- Le dejo sus cobijas aquí y unas almohadas, se le ofrece otra cosa antes de dormir?- dijo una mujer con atuendo de criada yo la mire.

- Sólo una cosa, me llamo Sam y no señorita, háblame de tú y no de usted por favor- dije, ella asintió con la cabeza y salió del cuarto, yo me acosté como pude sin ponerme el piyama y me quede profundamente dormida, y suplicaba que al despertar no estuviera aquí y que sólo fuera un sueño, un maldito sueño del que tenía que despertar.

Hola, lamentó tardar en subir pero mi internet es gay y no pude subirlo a tiempo XD gracias por sus votos.

Todos los viernes como lo prometí subiré capítulos de todas mis novelas y si no puedo encontrare la manera de recompensarlo en la semana.

Desenmee suerte ;)

TE DESEO SUERTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora