Prometo no hacerte daño

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Me quede dormida en la sala eso fue lo que pensé al despertar pero estaba en mi cuarto en cobijas aún. Tobías estaba en el suelo dormido con tan sólo una almohada en su cabeza..Despertó.

- Buenos Días Drive- dijo mientras se sentaba y se estiraba.

- Hola- dije sonriendo- como llegue aquí? Qué yo sepa no me desperté.

- Me ofrecí a cargarte en brazos hasta aquí - dijo mirándome- y digamos que algunos se fueron a los departamentos, me quede.

- Por que?- ya sabía la respuesta pero aún así pregunte.

- No te iba a dejar sola Drive- dijo poniéndose de pie y sentándose en el borde de mi cama.

Sonreí estaba siendo tierno y eso no era bueno tengo que pensar en otra cosa no en el..CONCENTRATE SAM me dije a mi misma.

- Voy a hacer el desayuno- dije levantándome,tenía puesta la ropa de ayer.

- Te acompaño y por sí te interesa me gusta los huevos estrellados- dijo bajando conmigo las escaleras.

- Considerare esa información- dije riéndome mientras bajaba.

Saqué el sartén y lo puse a la lumbre, ratito después le puse aceite y eche el primer huevo, Tobías se acerco y prendió la radio, estaba una canción muy pegajosa..empezó a bailar.

Lo mire y me eche a reír estaba bailando She looks so perfect, se movía al ritmo y me quede mirándolo.

- Ven aquí- y me jalo hacia el sujetándome de mi cintura.

- Créeme cuando te digo que no se bailar- dije

- Yo Tampoco- dijo alto para que lo escuchara.

Bailamos a lo loco y el me cargaba algunas veces y me daba vueltas,me reí era divertido bailar así hasta que me di cuenta que algo se quemaba.

- Shet- dije quitando el huevo que estaba ya oscuro Mire a Tobías ya que era el suyo- te gustan los rostizaditos?- le pregunte.

- Podría probarlos- dijo sonriéndome.

Tenía una apariencia entre explosión y quemado, le serví el desayuno en su plato, lo observaba detenidamente hasta que lo probó.

- Sam Drive este es el mejor huevo quemado que he probado en mi vida!- dijo partiéndolo en pedazos más pequeños.

- Como te puede gustar? Prácticamente esta destrozado- dije sorprendida.

- Bueno es sólo que me gusta todo lo que este quemado el queso, las galletas, no se lo tengo desde niño- dijo metiendose otro bocado.

Yo me serví un huevo revuelto con jamón y queso, y le serví a Tobías jugo de naranja. La música paro.

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- Rico desayuno podría acostumbrarme- dijo dejando su plato y su vaso en el fregadero.

- A que? A qué consienta- dije fulminando lo con la mirada

- A que despiertes conmigo cada mañana, bailemos y me hagas el Desayuno- dijo acercándose a mí me puse nerviosa de nuevo.

- No hagas eso- dije poniéndole el puño en su pecho para que no se acercara más.

- Aún te pongo nerviosa no?- dijo con una mirada que la verdad era encantadora.

- Nunca me has puesto nerviosa- mentí

-Algún día lo admitirás- dijo alejándose un poco.

- Admitir que?- dije a la defensiva

- Que te gustó - dijo mirándome

- Pues lamentó decepcionarte- dije marchandome decidida de la cocina pero Tobías me agarró del brazo antes de salir.

- Por favor, sólo trata de.. De confiar en mi, déjame entrar en el - dijo señalando mi corazón.

Lo mire.

- Tú me prometiste no rendirte, bien pues yo te prometo no hacerte daño- dije y me solté de su brazo.

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Era verdad lo que dije sobre no hacerle daño, no sabía hasta que punto podría amar a una persona y peor aún si no creo en que querer a una persona y pensar en su felicidad, en pocas palabras ya no creía en el amor y no quería ni hacerle daño a el, ni a nadie, ni a mi. llegue a mi cuarto y me encerré me tire en la cama y leí un rato hasta que me quede dormida.. Odiaba quedarme dormida.

TE DESEO SUERTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora