La única pregunta que realmente importaba era: ¿qué es lo que siente ella realmente por él? Le había dicho que le gustaba. Pero, ¿hasta qué punto? ¿Sería un simple crush o algo más fuerte? Y, lo más importante, ¿por qué siempre aceptaba el hecho de...
― Jimin, soy yo. Abre la puerta. ―esperó y esperó hasta que se rindió. ―Bien, te dejaré la caja aquí afuera. Ya me voy.
Sorpresivamente la puerta se abre y una mano jala del brazo de la chica metiéndola adentro de la habitación.
Mika no tuvo tiempo de reaccionar.
Jimin le tapó la boca con una mano mientras que con la otra prendía el interruptor de la luz.
― ¿So Hyun te ha visto?
Mika negó con la cabeza con la boca aun cubierta.
La envolvió en sus brazos. ―No puedo creer que al fin puedo abrazarte. ―besó su cabeza. ―Estabas allí, a dos pasos de mí y no podía decirte cuanto te necesitaba. ―besó su frente. ―Te extrañé tanto. ―besó sus labios.
En vez de devolverle el beso Mika lo empujó. ― ¡Eres un idiota! ¿Sabes cuan triste estaba porque no podía ni siquiera mirarte a los ojos? ―le decía la rubia mientras le daba golpecitos en su pecho.
― Sabes por qué lo hice. ―la sujetó de las muñecas.
― Igual podrías haberme advertido que serias tan distante. ¡Suéltame! ―Mika agitó los brazos.
― De acuerdo, pero cálmate. ―la soltó sin soltarle de las manos. ―Por favor, déjame aprovechar este momento, antes de que So Hyun regrese.
― ¿Cuál es tu idea de aprovechar el tiempo?
Jimin la miró con una media sonrisa.
― ¡Por Dios! No estarás pensando en... ¡Pervertido! ―volvió a golpearle el pecho.
― No pensaba en eso, tonta. ―le sonrió. ―Solo... tirémonos en la cama, abrazados. Puedes dormir si quieres, yo solo te abrazare hasta que la loca de mi ex llegue.
Jimin la tomó de la mano y la guio a la cama. Se acostaron bien cerquita y ambos cerraron los ojos. No querían hablar, solo querían saber que estaban juntos.
― Dime algo. ―el pelinaranja rompió el silencio. ― ¿Soy el primero?
― ¿Primero? ―preguntó Mika sin abrir del todo los ojos.
― Ya sabes, tu primer novio.
Mika levantó su cabeza para poder mirarlo. ― ¿Quién dijo que somos novios?
― ¿No lo somos?
― Nunca me preguntaste.
― No hacía falta; yo te quiero, tú me quieres. No hay nada que aclarar.
― Pídemelo.
― ¡Vamos! Sabes que soy tímido.
― Pídemelo u olvídalo.
Jimin dio un largo suspiro. ― Te gusta hacerlo difícil.
― Olvidalo, no importa. ―Mika se incorporo y se sento en la cama dándole la espalda.
― Nos amamos. ¿no es cierto? ―Jimin se incorpora también, sentándose de lado, mirándola.
― Ya entiendo. No quieres ponerle una etiqueta.
―No necesito llamarte mi novia. Eres mi chica desde la primera vez que sostuve tu mano. Y todos lo saben.
― Bien. ―la rubia se levanta de la cama. ―Me ha quedado muy claro. Solo soy tu juguete.
― ¿Que tonterías estas diciendo?
― No importa, Jimin. Déjalo así. De todas formas, no iba a durar mucho lo nuestro.
― Yo hare que dure lo que tenga que durar.
Mika abre la puerta y se topa con Jungkook. Éste levanta la cabeza y Mika ve sus ojos llorosos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La chica no dice nada, solo lo mira. Había dolor en su mirada. ―Jungk- -
Jimin la vuelve a traer hacia dentro de la habitación y le echa una mirada al más chico. ―Lo siento, Jungkookie, estamos ocupados ―cierra la puerta, pero el maknae pone un pie trabándola.
― ¿Es verdad? ¿Mika es solo un juguete para ti? ―Jungkook cierra las manos en puños.
―Por supuesto que n- - ―un puñetazo aterriza en la mejilla del pelinaranja. Jimin queda medio mareado asi que el pelinegro avanza hasta Mika y la toma de la muñeca.
― ¿Jungkook-ah, que- -?
― Cierra la boca y ven conmigo.
Mika echa un vistazo al golpeado y noqueado Jimin asegurándose que esté bien.
―Jimin esta lastimado.
― ¡Lo sé, duh!
― Déjame ver que no está mal herido. ―decía mientras trataba de soltarse de su agarre.
