Capítulo 5

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*Narra Fati*

Hace cinco minutos que hablé con Dani y me dio la mejor noticia de todas; Alberto había despertado tras estar casi dos semanas en coma. También me dijo que volvería en unos días y que tenía ganas de verme. Tenía tantas ganas... Mi móvil sonó otra vez, pero no era una llamada sino un WhatsApp.

-Mi princesa, siento decirte que nos tenemos que quedar más por el hermano de Cris, volveré cuanto antes para poder verte cielo. Te quiero pequeña <3

Sonreí al leer el contenido, aunque también estaba triste porque quería verlo ya. Respondí.

-No importa cariño, te espero lo que haga falta. Pero espero que vengas, que sino voy yo a buscarte eh, jajaja. Te quieroooooo<3

Dejé el móvil al despedirme de Dani y me puse a ver la tele. Media hora después, vino Miri, la prima de los gemelos y mi mejor amiga. Se me ocurrió un plan y decidí contárselo para ver qué opinaba. Llamé a mi madre y aunque me costó convencerla lo hice, así que cogí mis cosas y me fui con Miri.

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*Narra Álex*

Creía que iba a morirme, hace unos días que no hablo con Marta, desde que me vió con ella. La llamé tantas veces que me gasté el saldo entero en un sólo día. No podía dejar de llorar, desde que vino y estuvimos hablando he estado súper rayado. Decidí mandarle un WhatsApp, miré su última conexión y sorpresa, estaba en línea.

-Marta joder, sé que he hecho mal. Sé lo que ha significado esa chica en la vida de todos, sobre todo en la de Cris. Pero me dijo que quería hablar conmigo para aclarar unas cosas sobre nosotros, no sabía nada. Pero te juro que no ha pasado nada entre nosotros, desde el otro día no la he vuelto a ver y... Tu sorpresa sigue esperando aquí, en mi casa. Espero que te hayas dado cuenta de que soy un estúpido y de que te quiero más que a nada. Lo siento.

Lo envié y tragué saliva, esperé un minuto y al ver que no respondía, me rendí. Bloqueé el móvil, lo puse a cargar y bajé al salón a ver la tele para distraerme.

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*Narra Andrea*

Recibí el mensaje de Cris y enseguida puse camino hacia el hospital, Alberto había despertado y sus padres no estaban, así que fui a hacerle compañía. Cuando llegué a la 306, vi que estaban los gemelos, Cris y Marta. Fui saludando a cada uno y luego fui a saludar al pequeño.

-Buenas tardes, Alber- le dije dándole un beso- ¿Qué tal estás campeón?- sonreí.

-Bien, pero no sé por qué estoy aquí. Me quiero ir, jo.- dijo frunciendo el ceño y cruzándose de brazos.

-Tranquilo, pronto saldrás de aquí y volverás a casa. ¿Quieres comer algo?- dije sacando una chocolatina de la bolsa que llevaba.

El niño asintió y enseguida cogió la chocolatina. Todos sonreímos al ver el gesto y salimos de la habitación dejándole comer la chocolatina agusto.

-¿Qué tal estás?- dije agarrando el brazo de mi amiga.

-Pues bien, mejor que estos días, por supuesto- dijo Cris mientras Jesús le abrazaba por la espalda.

-¿Y tú Marta?- dije mirando a ésta.

-Eh... Bien, bien- dijo ella algo aturdida.

Sabía todo lo que había pasado entre Álex y ella, pero no quería remover nada. Sólo quería ver bien a mi amiga, ese era mi principal objetivo.

Imprescindible (Gemeliers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora