Capítulo 23

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(Jesús)
--¡Cris ven aquí! -- digo mientras voy detrás de ella intentando alcanzarla.
--Nunca me cojeras -- aseguró ella corriendo aún más por las calles esquivando personas, coches e incluso animales.
Tanto me tentó que cogí fuerzas e hice un pequeño spring, con lo que la alcancé y la cogí de la cintura.
-- ¡Pillada! -- exclamé victorioso.
-- Sueltame por favor, ¡tengo vértigo! -- se excusó ella para que la bajara, en realidad no estaba ni a un metro del suelo.
-- ¡Pero qué mentirosa eres! -- dije a carcajadas y Cris me dio un leve codazo -- Anda vamos que te tengo una sorpresa -- dije cogiéndola de la mano y dándole un beso en la frente -- Pero antes de nada -- dije parándome en frente de Cris -- Quiero que te pongas esto -- saqué un precioso pañuelo azul del bolsillo trasero de mi pantalón y sé lo puse en las manos, a lo que ella negó con la cabeza.
-- Ni loca -- negó -- ¿Y sí me mato? -- dijo haciendo pucheros.
-- ¿Te crees que voy a dejar que te pase algo mientras estés conmigo? Ni muerto. -- respondí seriamente, y luego sonreí.
-- Esta bien... -- suspiró aceptando.
Le coloqué el pañuelo y fuimos hacia la sorpresa.

Para mi sorpresa llegamos antes de lo previsto, así que decidí sentarnos en un banco y esperar a que pasara un poco más de tiempo, no quería adelantarme y fastidiarlo todo.
-- Entonces, me has dicho que te desmayaste y no te acuerdas de nada -- asentí repitiendo lo que Cris me había contado por el camino -- Dios... Te llega a pasa algo y... -- ladeé la cabeza sólo de pensarlo.
Miré el reloj y, perfecto, ya era la hora. Cogí a Cris de la mano y la llevé hasta la orilla del río. Eran las ocho de la tarde, así que ya era de noche y hacia un poco de frío ya que estábamos en la orilla, esto no es Sevilla.
-- Hemos llegado -- le susurré al oído y Cris se estremeció, sonreí al notarlo y le quité la venda. Miró atónita al cielo e instantáneamente me besó.
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(Cris)
Llegamos y al quitarme la venda me quedé atónita, Jesús había contratado a una compañía para que estuviera dando tumbos en el cielo dejando así un rastro que escondía una pequeña frase: 'Yo quiero un mundo contigo pequeña' J.
Instantáneamente me di la vuelta y le planté un beso a Jesús, estábamos en el Fluvial, el parque más bonito de toda Salamanca, sentados en la orilla del río a la luz de la luna junto a las estrellas, y yo al lado de la persona que más amaba en estos momentos.
-- Eres idiota por hacer esto, pero te adoro. -- le susurré al oído apoyándome en su hombro cerrando los ojos.
-- Cris -- dijo él mirando al horizonte -- Eres mi casualidad más bonita. -- puntualizó.
Yo sonreí e inevitablemente se me escapó una pequeña lágrima que evité que la viera Jesús, sorbí la nariz y volví a sonreír apoyada en su hombro.
Estuvimos unos minutos en silencio, contemplando el paisaje y la noche tan bonita que se había quedado hasta que lo rompí.
-- Te quiero, Jesús Oviedo.
-- Te quiero, Cristina Martín.
Me agarró la mano con fuerza y yo le secundé. Ojalá así toda la vida, ojalá.

Noté como alguien me zarandeaba susurrando mi nombre e instintivamente me fui despertando poco a poco, hacia frío, lo cual no estaba en mi casa, así que me asusté un poco.
-- Cris, despierta -- susurraba Jesús -- Te has quedado dormida en mi hombro y son las diez, venga, te acompaño a casa -- musitó.
-- ¿Las diez? -- pregunté desvelandome. Jesús asintió y se levantó, me tendió la mano y yo acepté y me levanté a su lado, le agradecí con una sonrisa.
-- ¿Vamos? -- dijo ofreciéndome la mano.
-- Vamos -- dije con una sonrisa dándole la mano.
Y nos fuimos de aquel maravilloso lugar que ahora sí estaba a la luz de la luna y las estrellas.

Al día siguiente...

(Marta)
-- ¡ESTOY FLIPANDO! -- dije saliendo por la puerta del aula -- La so zorra de la profe me ha puesto sólo un siete -- musité enfadada.
-- A mí un cinco, no te quejes. -- replicó Cris.
-- A mí un ocho -- dijo Andrea victoriosa.
-- Puta -- dijimos Cris y yo al unísono. Nos miramos y nos reímos, siempre hemos estado muy compenetradas.
-- Por cierto Cris, me dijo ayer Dani que Jesús te tenía una sorpresa -- dijo Andrea arqueando las cejas.
Asentió y nos dijo que fuéramos afuera, no quería que nadie supiera sus escapadas con Jesús.
Al poco rato, terminó de contárnoslo y no hacíamos más que abrir la boca de asombro y suspirar.
-- Madre mía tía. Es precioso...menos mal que todo se ha arreglado que sino... Me sentiría súper culpable -- musité cabizbaja.
-- Eh, tú no tienes la culpa de nada, ¿me oyes? DE NADA -- aclaró Cris deletreando las últimas palabras.
-- Bueno -- intervino Andrea -- Yo... También os tengo que contar respecto a Dani... -- susurró jugando con sus dedos. Cris y yo nos quedamos mirándola atónitamente para que prosiguiera. -- Pues a ver, ayer cuando os fuisteis vosotros -- miró a Cris -- Nos quedamos solos y pues... A ver, no penséis mal -- aclaró -- Pero nos dimos así una especie de beso, diría yo -- expliqué dubitativa.
-- Vamos, que os liasteis -- aclaré asintiendo.
-- ¡Qué fuerte! ¡Qué fuerte! -- exclamó Cris moviendo las manos.
-- Pero por favor, no digáis nada a nadie. No quiero que se entere nadie, y menos Fati, sino me odiaría y no quiero. Sólo... Fue un simple beso, sin sentimiento ni nada... -- intentó mentirnos, pero le fue en vano.
Las dos asentimos para no preocuparla, pero sabíamos perfectamente que ella aún seguía sintiendo algo por Dani, y creo que él por ella también. Ya se vería el final de esta historia interminable.
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Chicas! Bueno, pues después de varios días aquí está el otro, siento sí es corto. Pero es que ando liada con trabajos que tengo que hacer para Septiembre (os recomiendo que aprobéis todas sino queréis estar como yo). ¿Os ha gustado este cap? ¿Pasarán ya definitivamente Andrea y Dani de la friendzone? ¿Os ha gustado la sorpresa de Jesús a Cris? Dejad comentarios de vuestras opiniones y sí queréis darme alguna sugerencia la apuntaré alegremente, también que sigáis votando que me encanta recibir notificaciones de votos, porque me doy cuenta de quién lee y eso me gusta, no quiero que seáis lectores fantasmas.
Hasta el próximo capítulo ¡OS QUIERO!

Imprescindible (Gemeliers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora