Capítulo 12

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Pasaron unas cuantas semanas de total tranquilidad para Vladimir, desde que se había "enfrentado" a Ahri en la cafetería de la Academia de la Guerra. A veces la encontraba mirándolo, tanto en las monótonas horas de clase como en el receso.

Tenía que admitir que la consideraba bastante bonita, a pesar de su personalidad tan molestosa y zorruna. Pero, no estaba en lo absoluto interesado en ella. Ni con su habilidad de atraer a sus enemigos lograría enamorarlo.

Los hemomantes estaban destinados a estar completamente solos, en especial los que eran como él: Un mago controlador de la sangre con deseos enfermos de ver a todos con líquido carmesí brotando de heridas de sus cuerpos ya sin vida.

En el receso, sólo se limitaba a sentarse en las raíces de su árbol favorito para leer. Y si llovía, buscaba la banca que estaba cerca de las escaleras.

—Hola Waldemar —escuchó que alguien dijo, cerca de él, mientras se encontraba totalmente concentrado en una escena que leía en su libro. Levantó la vista, y era La vastaya de nueve colas.

—... El otro día te dije que ese no es mi nombre —murmuró El segador carmesí, mirándola con ojos que parecían tener la pupila, y no el iris (o era tan claro que se fusionaba con la parte blanca de los ojos).

—Ah, sólo recuerdo que dijiste que te gustaba el olor a pino —dijo Ahri, con una risita a la par de que se sentaba en una raíz.

(Vladimir no tenía ni la más mínima idea de que, años después, recordaría el momento en que le dijo a ella sobre su gusto al aroma que emanaba los pinos y que su nombre no era Waldemar; mientras se encontraba castigado con El mago rúnico y tres de sus compañeros, entre ellos Ahri).

—No te molesta que me siente aquí, ¿verdad? —continuó ella hablando, y sacó de su bolso su teléfono celular para comenzar a escribir mensajes de textos o algún pensamiento para publicarlo.

—Si viniste a pedirme la tarea del viernes, aún no la hice —dijo Vladimir, volviendo su vista al libro para no mirarla—. De seguro Ekko ya la hizo.

—Jaja, yo no vine para eso, cariño. Sólo quería sentarme aquí porque parece un lugar bastante tranquilo.

"Lo era hasta que tú apareciste", pensó El segador carmesí, algo indiferente.

—¿Qué lees? —le preguntó ella. Pero antes de que él dijera respuesta alguna, le arrebató el libro de sus manos con mucha agilidad— Hasta la última gota —leyó la portada del libro rojo con letras negras— ¿Me dirás de que trata o lo averiguo por mi cuenta?

—No lo comprenderías...

—Al menos intenta explicarlo, dulzura.

Ese comentario lo ruborizó un poco, extendió la mano para que ella le diera el libro de vuelta.

—Trata de un hombre obsesionado con una mujer —comenzó a narrar Vladimir, con tono serio.

—Oh, una bella historia de pasión romántica me fascina —se apresuró a decir la zorra, apoyando los codos sobre su regazo para sostener con las manos abiertas el mentón.

—Ese hombre es un asesino con una gran inestabilidad mental, procedente de los bosques oscuros de Noxus; y la mujer proviene de Jonia. Lo que a él le obsesiona es el deseo de matarla, llevarse el cadáver para ponerlo en su cama, y así tener a alguien con quien dormir todas las noches. —prosiguió Vladimir, y se asustó un poco al ver el cambio de humor en el rostro de La vastaya de nueve colas: De alegre a perturbada.

—Además, desea embotellar su sangre para así beberla cada noche, antes de acostarse o después de un banquete con personas del Alto mando. —agregó él, y le puso el marcapáginas al libro.

—Wow, ¿cómo es posible que libros así existan? —dijo Ahri al fin, incrédula ante lo que su compañero raro le acababa de contar.

—Te puedo asegurar que hay libros mucho más siniestros que este. —comentó Vladimir, esbozando una muy ligera sonrisa.

—¡¡Oye, Ahri!! —exclamó alguien a lo lejos: Era Taliyah, con Jinx, Ekko y Ziggs.

—Tengo que irme, hablamos después. —Ahri se levantó de un salto y se alejó corriendo para reunirse lo más pronto posible con sus amigos.

—Adiós... —dijo Vladimir, y continuó con la lectura, a pesar de que no podía dejar de pensar en el raro interés de La vastaya de nueve colas

Sangre por doquier [League of Legends]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora