Capítulo 10

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Narra Vega.

  Una sonrisa aparecía en mis labios al ver, que ya los entrenamientos estaban por terminar. Ya estábamos en la segunda etapa de la concentración, me llena de orgullo y satisfacción ver que habíamos evolucionado. Nuestro equipo se había acoplado perfectamente a la indicaciones de Peraza, no podía negarse que era exigente y eso le podía algo de esfuerzo al entrenamiento. Sin sudor no hay gloria

—¡Vamos chicas! —Animó Peraza, mientras terminábamos las flexiones de pecho.—18, 19 y 20. Perfecto, vayan a hidratarse para hacer el colectivo.— Todas corrieron a tomar agua mientras y no pude evitar sonreír, parecían niñas. Al apartar mi vista de las chicas, me concentre en ver la portería que tenía en frente; como algo tan simple podía convertirse en un sueño. Me levanté del césped, camine hacia un balón que estaba a poca distancia de mi y comencé a dominarlo. Sin apuros con leves toques hacia que el balón pasara de derecha a izquierda sin dejarlo caer, seguidamente hice la vuelta al mundo y luego pase el balón a mi izquierda haciendo lo mismo. Al dejar de hacerlo, patee el balón quien salio disparado hacia el cielo dándome segundos para acomodarme; deje que el balón pegara en mi pecho inclinando mi cuerpo para así dominarlo. Con un pequeño movimiento ejercido por mi pecho, el balón descendía lentamente hasta que lo patee fuerte y termino en las redes de la portería. Sonreí ante ello en ningún momento mire hacia el arco, mi tiro fue a ciegas pero mi mente sabía exactamente donde estaba; haciendo perfecto el tiro. Ahora entendía el afán de mi padre sobre tener la portería entre ceja y ceja.

Oye Vega— Me llamó Angie, aparte mi vista de la portería y volteé a ver a Campos.— ¿Que te parece, si lanzo tiros desde el córner y tu intentas patearlo en gol?—Ante su pregunta, asentí.

¿Pero que tal, si le ponemos mas presión? —Le propuse alzando mi ceja y observando la retóricamente.

Bien, puedo con ello.—Respondió segura de sí misma Angie.

Genial, 5 tiros y quien los haga 2 o 2 tiros mientras la otra falle, gana y la que pierda paga.— Dije acercándome a ella, amaba los retos por hacer que me exigiera y este no sería la excepción.

Trato hecho— Estrechamos nuestras manos, haciendo mas divertido aún el reto.—Suerte.— Dijo Angie antes de irse a su lugar. Camine hacia el centro de área, observe que estaba muy adelante y eso podía afectar un poco al momento de definir un balón potente. Así que retrocedí un poco hacia la izquierda y observe como Angie se preparaba. Fue allí en donde decidí hacerlo mas difícil, alce mi mano derecha y al instante ella, quien se disponía a disparar se detuvo.

—¿ahora qué? Vega.—Grito molesta Campos y no pude evitar sonreír maliciosamente, al ver a Cáceres acercarse.

—Nay, ¿Puedes ir a la portería? Es que Angie y yo tenemos un reto, así tu podría ponerle presión.— afirme mientras Cáceres parecía pensarlo, esperaba que ella aceptará; Nay sin duda era la mejor entre los 3 palos.

La Dama Del FútbolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora