Insomnios en tu cuerpo

Todo de mí

- No, no, no, esto no puede ser cierto doctor, usted tiene que estar equivocado.

- Señora Sandoval todos sus síntomas son muy evidentes y ya es un hecho, usted está embarazada, felicitaciones.

No sabía que decir, en este momento estaba en shock, ¿por qué? ¿Por qué otro hijo de Saúl?, Maldigo él momento en que tome la decisión de ser tan débil ante él.

- Señora Sandoval, señora...

- ¿Si? - interrumpí

- le voy a medicar unas medicinas para calmar sus náuseas y por favor le pido reposo y nada de situaciones estresantes.

- Si doctor, muchas gracias, pero antes de irse quiero que no diga ninguna palabra sobre mi embarazo, aun no es el momento de saberlo.

- Pero señora Sandoval, ellas tienen que saber de su estado, además tiene que tener reposo.

-Sí, eso lo sé, pero en su momento se los diré, respete mi decisión.

- Esta bien señora Sandoval, pero entre más rápido lo sepan es mejor.

- Muchas gracias, lo acompañó a la salida.

- No tranquila sé dónde está ubicada, usted debe descansar.

El doctor Fablet sale de mi habitación y no podia evitar pensar en cómo le explicare a Lucia de mi embarazo, a Denisse era mucho más fácil, pero ¿a lucía?.

Vendrían las preguntas y ahora no me siento con la fuerza para explicarle todo de mí, de mi pasado, de su padre, de su hermano, esto era demasiado, mi dolor de cabeza aumentaba.

- Mamá podemos pasar.menciona lucia en la puerta.

- Claro lucía pasa.

-Mamá ¿cómo te sientes?

- Mejor, solo fue tanto cansancio por la constructora, no era necesario llamar al Doctor Flabet.

- ¿Como que no? Es preocupante que te desmayes y te pongas pálida de la nada, tú ni en los proyectos más grandes te tensiones y te pones de esa manera, así que déjate cuidar y no te hagas la fuerte.

La miro levantando la ceja.

-¿Que? Aunque no pasemos mucho tiempo juntas te conozco Altagracia.

- Ah con que ya me llamas Altagracia

- Si, ya que nunca me llamas mi niña, mi vida, mi amor, ni nada por él estilo.

- Tú sabes muy bien que no soy así pero eso no significa que te dejare de amar, además ¿a qué viene eso?

- ¿Se puede pasar? - menciona Denisse.

-Claro, ¿cómo te diría que no?

Le hice señas a Denisse con la mirada para que encontrará alguna excusa para que lucía nos dejara a solas.

- Altagracia podemos hablar. menciona

- Por supuesto, lucia vete a tu cuarto y después seguimos hablando.

- Claro, como digas MAMÁ.

- ¿Qué le pasa a lucía? , ¿Porque menciono Mamá de esa forma?

- No lo sé, solo me reclamó porque nunca le digo mi amor, mi vida y esa cursilerías que ni van conmigo.

- Altagracia, no seas así con ella, no la trates tan duro, es apenas una niña.

- ¿Crees que no lo sé?, pero no puedo tratar de ser alguien que en verdad no soy.