Llena de celos.

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- a ver Altagracia celos, vine ayudarte a bañar. - menciona Saúl entrando a la habitación.

- No me parece nada chistoso y créeme ayuda no necesito que yo sepa mis dos manos están bien .-menciono sujetando mi toalla, pero Saúl y su costumbre de devolverme del brazo

- ven para acá enojona, sabes que les encanta provocarte y te dejas, te daré muchos besos para que se te pase.

 - Si saben que soy así no deberían de ponerse en esas .

Saúl empieza a darme besos por él cuello .

- ni creas que tus besos me van alegrar.-menciono parándome firme y cruzándome de brazos.

- es que saben que te ves hermosa celosa, hasta yo lo haría por verte tan hermosa.

Tengo ganas de reírme pero muerdo mi labio para evitarlo y Saúl lo nota.

- Intentarlo para ver como te va.-menciono seria.

- en primer lugar si te causa risa, deberías reir, también te ves hermosa y si te muerdes el labio no me podré controlar.

- No me quiero reír Saúl, tú piensas que todo es un juego y no me provoques con eso de "no te muerdas él labio".-menciono moviendo mis dedos.

- está bien, ya vi que de verdad estás muy enojada, entonces mejor me iré a jugar con Macarena.

Me encanta cuando trata de contentarme pero aveces no resulta como quiere, así que dejo de lado mi enojo y me tiro en su espalda.

- Me encanta cuando quieres hacerme reír.-susurro.- pero me desilusionas cuando te rindes fácilmente.

- a mí no me gusta rendirme, solo que aveces te pones muy difícil, ven te doy un beso para que se te calmen los celos.

Saúl me sujeta y hace que de una vuelta quedando en su frente y sin pensarlo solo se une a mi, con sus labios suaves, gruesos y tiernos, me besa por unos minutos y me observa .

-Aún no se me pasan los celos, creo que no se me quitaran en todo él día.- susurro

- que te parece si nos bañamos juntos y vemos si se te pasan, sino a mí no me molestará quedarme todo el día.

- Si ese es tú método y mejor manera para lograr quitármelos vamos a intentarlo.

Saúl me carga y yo enrollo mis piernas en su cintura, abre la puerta y veo que la bañera esta llena.

-¿Y esto?

- pase la noche sin ti, me hacías falta, tenía algo preparado.

- supongo que así no tuviera celos aquí hubiese terminado.

- por supuesto, te necesitaba.

Pongo mis manos en él cuello de Saúl y lo beso ferozmente, Saúl me pega a la pared y pone su mano en mi pierna, empieza a subir mi bata y subo mis manos, la deja caer y yo quito su camisa, pega su cuerpo al mio y puedo sentir su erección sobre mi, río , me separo lo observó y vuelvo a sus labios.

- me encanta que me hagas él amor.-menciono jadeante.

- a mí me encanta hacer mia, mi doña.

Vuelvo a sus labios y antes de meternos a la ducha me bajo de su cintura.

- Esto sobra .-menciono bajando su pantalón y volviendo a su cintura, él se introduce en la bañera y al sentarse siento como se sumerge en mi interior, besa mi cuello y baja por mi pecho, se detiene y lo observo, no pares, él sigue atento a mi pecho, me veo y hay un morado.

Insomnios en tu cuerpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora