No soporto más

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- ¿Qué hiciste estúpida? No tenías ningún derecho de entrar en mi pieza. - mencionó y tomo de sus manos el suéter hecho pedazos de mamá.
- oh, llegaste lucia, que pena, niña me pareció algo dramático y cursi esto y decidí eliminarlo por ti ya es hora que te despegues.- menciona sarcástica
- tú no te tienes que meter en mis cosas, eres una maldita, lárgate de mi habitación espero que nunca te vuelvas a meter en mi habitación, eres detestable, por eso ningún hombre se fija en ti, Quien se va meter con una mujer tan repugnante como tú.
Observo la rabia en la mira de Alicia, quien se acerca a mí, me toma por el cuello y me pone contra la pared.
- mira niñita, no te la des de ingenua que aquí ese papel no te va, y si sigues así te va ir peor, cada día haces que te odie más, te deberían mandar a un internado mocosa
- ellos no me mandarían a un internado, para más rabia tuya ellos me quieren, la que estorba acá eres tú ¿Acaso crees que me importa tu odio? Me va y me viene, no seas estúpida. - mencionó para soltarme de su agarre, le doy una cachetada y ella se balancea sobre mi aruñando mis brazos y jalando mi pelo sin previo aviso le doy un golpe en toda su nariz, y me suelta observo cómo empieza a sangrar pero sin mayor importancia aruño todo su rostro y la tomo del pelo, observo cómo llega trigve y me toma de mi cintura separándome de ella.
-¡LUCIA! ¡LUCIA! CALMATE, ya, por favor.-menciona sentándome en la cama.
- Ya vez, esta niña no tiene control.- menciona Alicia
- pero fue ella la que empezó, me daño lo único que tenía de mi familia, mi cadena y el suéter de mamá, es lo único que tenía de ellos.
- Solo vine a recoger la basura lucia no lo hice con mala intención.
- no entiendo por qué tienes que ser tan altanera con ella, con nosotros eres todo lo contrario
- mira. Tomo el suéter de mamá que está en el suelo y lo muestro.
- está hecho pedazos por culpa de ella, si no me hiciera daño me portaría bien con ella.
- Alicia ¿de verdad hiciste eso? Una cosa es que tenga una nueva vida y otra que destroces sus cosas personales.
- solo creí necesario botar ese suéter de Altagracia.- menciona Alicia
- sea como sea ella siempre será mi mamá, me corta la comunicación con ella y no me dejan tener algo para sentirla cerca.
Mencionó y una lágrima se escapa pero inmediatamente la limpio. - no quiero que ella vuelva a entrar a mi habitación.
- Ya mi niña, hablare con Alicia, no quiero que esto siga así.
- pero trigve, lo único que hago es ayudar a que no siga con sus bobadas con Altagracia.- menciona Alicia.
- ya vamos afuera Alicia, por dios es una niña y tú ya está muy grandecita como para igualarte.
Alicia y trigve salen de mi habitación, cierro la puerta y echo pasador, tomo el suéter de mamá en mis manos, la cadena de Saúl que estaba totalmente dañada, me siento en el suelo y las abrazo a mí, intento ser fuerte pero a veces esto puede conmigo.

Altagracia Sandoval

Llegamos a casa luego de una tarde divertido, macarena comió mucho helado al igual que Mónica, Saúl comió solo uno y yo solo comí mi fruta.
- bueno mi amor despídete que ya Mónica debe irse.- menciono
- chao Mónica, espero que te vaya muy, muy bien a dónde vas y si ves a mi hermanita dile que la amo y que no me olvidé.
- claro que sí hermosa, nunca te podrían olvidar, si eres hermosa, te portas bien.
Macarena sube a su cuarto.
- Saúl por favor sube me quedare con Mónica
- claro que sí, hasta luego Mónica, de todo corazón deseo que te vaya muy bien en Londres, que encuentres muchas personas que te hagan bien y que triunfes porque te lo mereces.
- muchas gracias Saúl, de corazón deseo que sean muy felices.
Saúl se va y me quedo con Mónica.
- ¿me podrías hacer una favor?
- si por supuesto, dime.
- quiero que le lleves algo a lucia, claro si te puedes ver con ella
 - por supuesto Altagracia, será con mucho gusto dime ¿Qué quieres que le lleve?
- Quiero que le lleves un peluche, sé que le va encantar y una pequeña carta ¿a qué horas te vas?
- me voy en dos días a primera hora, tipo seis de la mañana, será un gusto llevarla, sé que le hará muy bien y ten por seguro que apenas la vea haré que te llame para que puedan hablar.
- gracias Mónica ¿te llevó a tú casa? Mira que ya esta tarde y no es bueno que vayas sola a esta hora
- ¿De verdad te preocupas por mí?
- claro Mónica, por favor, mira la hora que es, esto no es hora para que una señorita ande sola en la calle.
Escucho mis palabras y ya pienso que estoy hablando con lucia.
- ¿Entonces qué dices?
- claro que sí, me encantaría.
-Muy bien déjame ir por las llaves del coche.
Me dirijo a la cocina y busco las llaves, no las veo y recuerdo que Saúl las tiene, así que subo unas cuantas escaleras y grito.
- ¡Saúl!
- dime mi amor.
- me prestas ñas llaves del coche por favor
- ¿Para dónde vas tan tarde?
- llevare a Mónica a su casa, no es buena idea que se vaya sola a esta hora
- ¿Te acompaño? Tampoco es buena idea que te devuelvas sola
- si quieres, aunque por mí está bien
- yo te acompaño, no hay problema.
Saúl baja abrochando su blusa.
- pero yo manejo
- siempre quieres hacerlo, está bien.

Insomnios en tu cuerpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora