Los Hijos de Cordelia; Diabolik Lovers

Capitulo 12

—Shu!—susurre bajando mi playera— no, no hagas eso

El soltó un suspiro y me tomo en un abrazo.
Quedándose totalmente dormido, después de unos minutos vi que el estaba dormido y me levante, me dirigí a la colchoneta dónde estaba Yui durmiendo con Laito. Comenzó a moverla sin despertar a los demás.

—Uh? Angelina?—dijo viéndome—
—Shh —puse mi dedo en su boca—

Me acerqué a ella y susurre en su oído.

—Estás durmiendo con Laito, levántate y vayamos a dormir a mi habitación —sonreí—

Ella al escuchar el nombre de Laito se levanto y vio a su lado, se levanto rápidamente y tomo mi mano. Las dos comenzamos a reírnos cuando nos alejamos.

—Shu, te cambio de lugar —reí— me di cuenta hace apenas
—Ya sentía muy poco espacio —río—
—Ven —dije adentrándonos a mi habitación—

Ella asintió y entro a mi habitación, encendí la luz y deje que se acostara en mi cama.
Me recosté en el otro lado.

—No crees que los chicos se darán cuenta de que los fuimos?—dijo Yui—
—Si —reí— pero no puedo dormir con ellos

Ella me sonrío y yo a ella, después ella me habló.

—Angelina... he visto que eres ya más cercana a ellos—dijo sonriendo— no te agrada?
—Si, solo que no quiero toda la atención, solo quería que ella supieran que podían contar conmigo —dije alzando la mano— solo quería alcanzar esa luz, que estaba desde el gran oyó dónde estaba —sonrei— pero creo que volé más arriba de donde quería llegar —sonreí—
—He visto, que Laito es muy cercano a ti.. Angelina tienes algo que ver con el?

Ella quedó en silencio, creo eso fue un si.

—La Maldicion de Cordelia desapareció de ellos, ahora Laito, alucina que yo soy ella —dijo molesta—

Me quede en silencio, la Maldicion desaparecio.

La tarde siguiente estaba en la sala de estar viendo un libro, Angelina también leía una en el sofá acostada, y los demás permanecían en silencio, de alguna forma cuando ella sale de su habitación, todos se reúnen.
Comenzamos a oír sollozos, era kanato.

—Teddy, Teddy!—comenzó a llorar—
—Ahh, qué pasa Kanato?—dijo Ayato—
—Teddy, perdí.. a Teddy—comenzó a llorar—

Kanato era un niño muy mimado.

—Vamos Kanatito, solo era un oso de felpa —dijo Laito—
—Como eres capaz de decir eso Laito!—grito— Teddy es mi mejor amigo —comenzó a llorar—

Me quede atónita, en verdad cambia muy rápido de humor.

—Kanato —lo llamó Angelina—
—He?—dijo él calmado—
—Cállate, no me dejas leer —dijo fríamente—

Kanato quedó serio al verla y comenzó a llorar más fuerte.

—Angelina es mala conmigo —comenzó a llorar—
—Podría ayudarte a buscarlo Kanato —sonreí—
—Que? —dijo sorprendido— una simple humana como tú? Piensa ayudarme? —dijo serio— no seas estupida Yui!
—Oye, Kanato no me hables así a Chichinashi —dijo Ayato—

Vaya de alguna manera se sintió feo que dijera eso, me volví a sentar y vi a Angelina, ataba de cabeza leyendo un libro, parecía no importarle que Kanato haya perdido a Teddy.

—Angelina, me ayudarías a buscar a Teddy?—dijo Kanato dulcemente—
—Ah? Porque yo? —dijo viéndolo— tienes a cinco hermanos y a Yui aquí y piensas en escogerme a mi?—dijo inocentemente—

Kanato comenzó a llorar, en verdad a un niño berrinchudo, cruzó sus brazos molesto y se tiro al suelo.

—Subaru, ve y ayuda a Kanato a buscar a ese oso —dijo Reiji—
—Qu-que? Porque yo?—dijo a la defensiva—
—Si! Que Subaru me ayude estaría bien —dijo kanato feliz—

En verdad este chico es muy bipolar.

—Qu-que pero... ah! Oye suelta mi mano!—dijo Subaru—

Vimos como Kanato jalaba de la mano a Subaru para buscar a Teddy, Angelina no muestra sus sentimientos pero e el fondo sé que quiere a todos estos chicos.
Después de unos minutos, Ayato me tenía de el brazo llevándome a su habitación, cuando vimos a Angelina.

—Teddy, sal ahora Kanato te está buscando, el juego acabo —dijo abriendo su habitación —

Ayato y yo nos quedamos parados oyendo lo que decía, un pequeño niño, de cabello castaño claro, con un parche en su ojo, me quede tensa al verlo, el es Teddy?

—Quiero jugar más con Sally —susurro cercas de ella—
—Quisiera que jugarán más, pero no puedes, cuando kanato bueno a descuidarse te volveré a la vida, mientras tendré que volverte a tu estado natural Teddy —dijo palmeando su cabeza con una sonrisa—

Salió un niño de cabello blanco, con ojos azules, alas hermosas, una playera blanca y un cuerno de colores. Mis ojos se abrieron de par en par, acaso lo es el unicornio que vi a Angelina ese día que la busque?
Angelina voltee a vernos y tapo a los dos niños.

—Qu-qué haces aquí?—dijo Angelina alambrada—
—Así que puedes traer a la vida a los muñecos —dijo Ayato—
—Angelina, el es el chico que siempre me avienta por el balcón —dijo Teddy—

Ella los miró desconcertada y empujó a los niños a su habitación cerrando la puerta rápido.

—Es que, yo.. —susurro sonrojada— tome a Teddy sin permiso para jugar pero termine leyendo un libro y olvide volverlo en un oso —susurro—

Ayato soltó mi brazo y camino a ella acorralándola, tomo su mentón.

—Date prisa, no quiero que Kanato este soltando lágrimas por todos lados, es molesto —dijo dando un pico a sus labios—

No ojde oír ni ver lo que hacían, ya se Ayato cubrió con su cuerpo, ella se metió corriendo y no tardó ni dos minutos cuando el oso de Kanato ya estaba en sus manos.

—Teddy!—grito Kanato—
—O-oye ya puedes soltar mi maldita mano niño!—dijo Subaru—

Kanato se abalanzó a Angelina cayendo los dos al piso, Ayato los miraba serio al igual que Subaru, ahora todos desean estar con ella.

—Gracias por encontrar a Teddy!—dijo Kanato dando besos por todo su rostro—
—Basta!—dijo alejando a kanato— quítate de encima mío
—Angelina es la mejor —sonrío—

Kanato seguía dando muchos abrazos y besos a Angelina que podría jurar que necesitaba ayuda, pude ver como Subaru se fue con los puños cerrados y Ayato soltó una risilla al igual que yo.