Capitulo 14

696 49 1
                                    

Me encontraba leyendo un libro en mi habitación, nunca me había interesado en los libros pero los que he leído son bastante interesantes.

-Tengo sed -me dije a mí misma-

Deje el libro aún lado y me levante saliendo de mi habitación, llegue a la cocina y abrí el refrigerador sirviéndome un poco de vino de frambuesa.

-Parece que Reiji no a lavado los trastos -susurre- no sería malo ayudarlo, quiero que me vea hacer algo -sonreí-

Acomode los trastes, la verdad eran demasiados y comencé a lavarlos.

-Tararararararararararararra tararararararatararararara, tararararataratararaa tarararararatatararara!-tarare una canción mientras lavaba los trastes-
-Los hubieras dejado ahí, yo los lavaría -dijo Reiji atrás de mi-
-Reiji-san -sonreí- quise ayudarte
-No necesito tu ayuda -dijo serio-
-Oh.. -susurre- no importa, déjame terminar, si?-dije con una sonrisa-

Reiji permanecía serio con los brazos cruzados viéndome, sentia como su mirada estaba clavada en mi, tenía nervios de que el me mire así. Intente evitar que el estuviera ahí así que seguí taradiando una canción.

-podrías guardar silencio?-dijo serio- no me dejas leer
-Lo-lo lamento -dije sonrojada-

Seguí lavando los trastos cuando sentí unas manos rodearme, abrí mis ojos en sorpresa y Reiji puso sus manos sobre las mías ayudándome, la verdad es que mis manos temblaban al sentir su cercanía así.

-Porque tiemblas tanto?-dijo en mi oído- apresúrate a lavarlos
-L-lo lamento -sonreí- n-no estoy acostumbrada a que este Reiji-san tan cerca de mi
-Acostúmbrate -dijo serio-

Tragué saliva y segui lavando los trastos, Reiji es mi hermano mayor y casi no hablo con el, quisiera poder convivir más con el.

-Joven Reiji -dijo el mayordomo-

Reiji y yo volteamos de reojo y había una gran casa de color rosa.

-Dígame -dijo seriamente Reiji-
-Ah llegado un paquete -dijo serio-
-Déjelo en la mesa, enseguida lo veo -dijo serio-

El mayordomo asintió y desapareció entre las sombras, casi nunca lo veo, así pensaran ellos cuando desaparecía así?

-Vamos, apresúrate a lavarlos -dijo serio-

Asentí y seguí lavando, mis manos lo dejaban de temblar.

-Ah!-grite al sentir ardiente-

Había lavado con tanta fuerza que rompí el plato haciendo que los vidrios se enterraran en mi mano, tome mi mano con cuidado y lo observe asustada, estaba llena de sangre mi mano, cuando Reiji la tomo bruscamente y la lamió, me sonroje aún más.

-Nunca había probado tu sangre -susurro- pero es muy deliciosa, mejor que la de Yui -sonrío- Angelina, me concederías tomar de esta sangre? Tal vez así podríamos estar más tiempo juntos

Lo observe con una sonrisa y asentí, quiero que Reiji y yo estemos más tiempo juntos y si mi sangre nos unirá, lo acepto.
El siguió lamiendo mi mano y después tomo de atrás de mi cuello, la tomo bruscamente lastimándome.

-R-Reiji -susurre- ha-hay sangre en el suelo...

La sangre de mi mano salió sin parar haciendo que estaba cayeran gotas al suelo, se separó de mi y me sentí en la mesa. Reiji tomo un botiquín y comenzó a curar mi mano.

Los Hijos de Cordelia; Diabolik LoversDonde viven las historias. Descúbrelo ahora