Los Hijos de Cordelia; Diabolik Lovers

Capitulo 24

—Lamento tanto que él haya muerto, tal vez no supo acoplarse a la familia Sakamaki y termino muriendo —dijo Oliver.

Permanecí sería al escuchar de lo que estaban hablando, sobre ese chico que hacía unos días había arrancado su alma.

—Quién diría que estuviste enamorada de él hijo del mayordomo —río Ayato.

Mire sería a Ayato y rodee los ojos.

—Tú estás enamorado de Yui —dije molesta. —Lo peor es que con todos tus hermanos se deja chupar —dije sin verlo.

—¡Idiota! Retira lo que le dijiste a su majestad –me tomo de el brazo.

—No lo haré idiota —arrebate mi brazo. —Oye Yui, ven aquí

—¿Qu-que?—respondió nerviosa.

—¿Que tramas Angelina?—dijo Laito burlon.

Sin decir nada tome a Yui y baje su playera mordiendo una de sus pechos.
De reojo pude ver a Ayato molesto, Laito sonrojado y Kanato serio como siempre.

—Olvídalo, no lo permitiré —se acercó Ayato detrás de Yui para morder a Yui del cuello.

—¡Se ve tan divertidos, quiero beber la sangre de la perrita igual que Ayato y Angelina —se acercó a morder uno de sus piernas.

—¡NO DEJARÉ QUE TOMEN DE SU SANGRE ENFRENTE MÍO!—gritó Kanato. —Angelina, ¿porque bebés la sangre de Yui? Se supone que tú tienes que estar solo conmigo, puedes tomar de mi sangre pero no permitiré que Yui me quite a Angelina —diciendo eso se acercó a Yui subiendo su playera para morder su abdomen.

—Ch-chicos... po-por favor, duele —susurró débil.

—¿Que están haciendo ustedes cuatro? Hagan sus cosas en su habitación —apareció Reiji delante nuestro.

—Que aburrido —se separó Ayato de Yui.

—¿Porque no te nos unes Reiji?—sonrío Laito, al ver que no le hizo caso suspiro. —Bien, la diversión termina aquí perrita

—Tú sangre es una mierda —dije separándome.

—¿Que?—se separó Kanato.

—La sangre de Cordelia siempre fue una porqueria para mi, nunca saciaba mi sed —limpie una gota que se corrio por el costado de mis labios. —Me largo de aquí

—¡Angelina no me dejes solo!—gritó Kanato soltando a Yui.

Reiji al ver que los cuatrillizos habían dejado a Yui inconsciente en el suelo, suspiro cansado de que siempre hicieran eso, con lo que fue a la habitación de la peli morada.

—Kanato, por favor ve a comer dulces a otro lado, quiero descansar —sonrío acariciando el rostro de su hermano.

—Yo quiero que Angelina sea solo mía.. —se acercó tomando su rostro para juntar sus labios.

Intente quitar a Kanato encima de mi, recostándome en la cama pasó su mano por dentro de mi pantalón acariciando mi intimidad.

—Anteriormente no pude terminar —susurró cercas d mis labios. —¿Te gusta lo que sientes? ¿Hermanita?

—Kanato... n-no hagas eso —susurre alejándolo.

Al separarlo suspire pesadamente.

—Por favor, sal de mi habitación Kanato —dije sería.