Capítulo II: Triste y dolorosa verdad.

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/N/A: Heeeey, que tal uwu... bueno, en el capitulo anterior no deje ninguna nota por decirlo asi; Es por eso que dejare una pequeña aqui :3. Dejo en claro que no me gusta hacer sufrir al bichito :( hace bastante que queria escribir una historia asi... En el capitulo anterior Milo comienza a juntar las piezas de una dolorosa verdad... ahora tendra que afrontar aquello que sospechaba./


Dentro del taxi, mi corazón estaba latiendo a mil por segundo... apretaba con fuerza el asiento en el que me encontraba sentado, me sentía fatigado y cansado, mis hombros, de hecho, el cuerpo completo, se encontraban tensos. El cielo era gris... las nubes comenzaban a oscurecerse, yo mantenía mi vista hacia el frente; me hundí en mis más profundos pensamientos, los recuerdos invaden por completo mi mente... Recuerdos tales como nuestro primer beso... nuestra primera cita, cuando los chicos se enteraron de lo nuestro, nuestra boda... cerré con fuerza mis irritados ojos..."Camus..."La frenada del taxi me saco de mis pensamientos.

-Aquí es joven son-

-Gracias, tome-le entrego un billete de gran valor-, quedese con el cambio.

-¡w-wooh! Pero joven- Antes de siquiera poder terminar de oír sus palabras ya había salido del taxi.

Con sigilo me adentro al interior de ese lugar de mala muerte, observo cada detalle del lugar... sé que hacer esto será útil luego, a pesar de ser un mugroso lugar es amplio... tomaría mucho tiempo encontrarte... me acerco a la recepcionista del lugar, una chica de cabello celeste y ojos morados... debo pensar algo... y rápido.

-Hola buenos días, ¿en qué puedo ayudarlo joven?- Su voz es dulce.

-Eeh... estoy buscando a una persona, su nombre es Camus Verseu...

-¿Eh? Déjeme revisar en la lista de reservaciones... -Comienza a hojear un libro- oh... aquí, hay una reservación del señor Camus.

-¿Cuál es la habitación? -Pregunte de inmediato

-E-eto... señor no puedo darle esa información... el señor Camus me ha pedido que sea-

-¡Es mi esposo...!

-¿S-su esposo? P-pero el señor Surt llego 45 min antes que el señor Camus, usted no puede ser el espo-

-¿¡S-Surt?!...-Mis ojos se abren de par en par... ahora todo tiene sentido- n-no...

-¿S-señor...?

-Camus, el... esta engañándome...-Miro a la chica- te lo suplico... dame el número de la habitación... en la que mi marido esta engañándome.

-...- La chica tragó pesado.

En pasillo, largo y descuidado, me dirigía a la tortuosa verdad... La chica se apiado de mí y me dio el número de habitación, no fue tan difícil como creí, la chica se veía igual de asombrada y decepcionada que yo, "tome, esta es la copia de la llave de la habitación 205", ahora sostenía con fuerza la vendita llave, cada paso me acercaba más a la verdad... Ya de frente a la puerta, me detuve... respire profundo, inserte cuidadosamente la llave y gire la manilla, la puerta se abrió de par en par... mostrando la asquerosa escena.

-¡A-AH! ¿Acaso no saben tocar la puerta?- El desgraciado pelirrojo chillaba...Ambos amantes se cubrían como podían sus cuerpos desnudos

-Ca...Camus...

-¡M-Milo! Q-que estas...

-Espera...¿este es tu esposo? Ya había olvidado lo estúpido que se ve-sonríe triunfante a la vez que rie.

Jamás seré plato de segunda mesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora