Jamás seré plato de segunda mesa

Capítulo XVIII "Cicatriz"

Milo abrió la puerta de su casa, estaba de vuelta, llevaba en una bolsita las rebanadas de pastel de naranja y pie de limón. Kanon le había tomado por sorpresa, "¿qué demonios...?"volvió a pensar el escorpión. Miró su casa y luego ingresó por fin.

Sus hijos estaban en ma escuela, ellos ese día saldrían a las 5,"Pobres de mis chicos..."dijo en voz alta, cerró tras de sí la puerta. Aún tenía la duda sobre si lo que dijo Kanon era verdad... Eso de que vendría a verle a penas terminara su trabajo...

Caminó hacia el sofá y se dejó caer, echó la cabeza hacia atrás y suspiró...

-Creo que debería terminar mi trabajo... Antes de que llegue Kanon.

Al decir el nombre de su contrario se ruborizó... Luego meneo la cabeza en signo de negación y comenzó a darse palmaditas en la cara, como si estuviera intentado despertarse.

-¿Qué me pasa...?

Frunciendo un poco el entrecejo, para asi concentrarse, se dirigió hacia su oficina, era extraño volver allí luego de que él y Shura intimaran... De hecho, había dejado de trabajar allí, ya que no podía concentrarse, la imagen de Shura llenaba cada parte de esa habitación. Rechino sus dientes cuando la figura de Aiacos llegó a su mente. "Es un imbecil" dijo. Tomó su portatil y salió lo más rápido que pudo de la habitación. Con el portatil en los brazos se dispuso a trabajar en en el comedor de la casa, asi si le daba hambre no le daría pereza ponerse de pie y prepararse algo para comer.

(...)

Kanon estaba sentado frente a su ordenador, tenia una carpeta llena de documentos revisados, en una libreta tomaba algunos apuntes mientras que con su mano libre tecleaba a una rapidez impresionante. Estaba determinado en terminar su trabajo. "¿Realmente... Milo me estará esperando?" se cuestionó unos segundos, frenando en seco, pero luego continuó aún más rápido. No se dio cuenta cuando terminó, ya que comenzó a escribir el informe de la proxima semana.

-¿mh? ¿Estoy adelantando trabajo? - se hecho a reír- quién diría lo motivado que estoy...

Se sintió incluso orgulloso de si mismo, "buen trabajo Kanon" lo dijo imitando la voz de su padre, Aspros. Seguido de esto un silencio de ultratumba llenó el lugar. Se cubrio el rostro con una mano y con cuidado frotó sus ojos... Cuánto tiempo había pasado desde que no recordaba con cariño a su padre... O más bien, con melancolía. Siempre se había sentido impotente ante lo sucedido aquella noche... Si él hubiera estado allí "¿podría haber evitado la situación?" siempre que pensaba en eso esa pregunta llegaba a su mente, deslizó su mano sobre su rostro hasta dejarla caer sobre el escritorio... Aquel día si no fuera por estar en la universidad lo más probable es que estaría muerto... Es simplemente sorprendente el hecho que su hermano sobreviviera... Recordar el día que lo vio le hace sentier escalofríos.

//Flash-back hace un tiempo atrás, juesto el dia en el que vio a su hermano luego del incidente en la casa Géminis...//

Kanon caminaba junto a Milo hacia el aula en donde sería su siguiente clase, ambos hablaban animados sobre la última novedad en la escuela... En ottas palabras, hablaban sobre todas las cosas que ocurrieron en la fiesta.

-No puedo creer que de verdad allá pasado eso...

-Eso es lo que me comentó Mu- decía Milo- pero no creo que el asunto fuera tan grave.

-Eso espero - decía un poco divertido Kanon - ¿te imaginas y fuera verdad que ese chico de tercer año fuera quien destrozó la figura favorita del director?

-Psss, ya no estaría aquí - ambos soltaron un par de carcajadas- ay... Pobre diblo...

Cuando por fin llegaron al salón la calse transcurrió como si nada, todo normal, sin embargo Kanon tenia una sensación extraña desde hace algunos días, hace una semana para ser exactos. Milo notó esto pero justo cuando iba a preguntar si todo estaba bien terminó la clase, y como era costumbre Kanon tomó sus libros y le dijo "Genial, me muero del hambre" seguido de un "vamos con los chicos", el escorpión asintió.