¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La fiesta se organizó en un lugar alejado del internado así que si sucedía algo, el internado no se hacía responsable.
La caminata hasta allí no fue tan mala como pensé. Algunos estudiantes iban en autobús mientras que la mayoría iban caminando. Las calles estaban iluminadas por una luz tenue.
Iba acompañada de Luke que durante gran parte del trayecto hacia la fiesta no me habló. Agachaba la cabeza si le hacía algún comentario sobre algo o a veces respondía pero con simples palabras. Intrigada por su actitud me di cuenta que era por Hunter quién caminaba detrás nuestro junto a sus amigos. Reían y se empujaban entre ellos.
Desde que Luke supo que mi compañero de habitación era nada más ni nada menos que Hunter, tenía temor de juntarse conmigo y no entendía por qué.
El sitio de la fiesta era enorme. Habían chicos y chicas bailando descontroladamente entre ellos con alguna que otra bebida alcohólica entre sus manos. Se me hizo imposible no hacer una mueca cuando vi como estaban vestidas ciertas chicas. No era de esas personas que se fijaba en el atuendo del resto pero esta vez fue demasiado, no tenían casi nada de ropa. Desde dónde estaba podía ver como algunas chicas se subían más su falda dejando ver su ropa interior a los chicos que estaban a su alrededor.
A pesar de que estaba sola, porque Luke había desaparecido de mi lado, no la estaba pasando tan mal. Mi tranquilidad se esfumó cuando un grupo de adolescentes hicieron una gran ronda al lado de donde me encontraba.
-Rubia ¿Quieres jugar a quién aguanta más bebiendo?- preguntó una pelirroja.
-No bebo alcohol.- bajé la voz para no llamar la atención del resto. Pero a pesar de mi susurro algunos si me escucharon, incluyendo a Hunter que levantó la barbilla y cambió su atención hacia mí.
Desde que había llegado a la fiesta lo atrapé varias veces mirándome.
-Oh ¡Vamos! Son solo algunas bebidas.
Eché un vistazo al resto y maldije. Estaban todos pendientes de lo que iba a decir.
-Está bien.- acepté.
Una pequeña sonrisa se escapó de los labios de Hunter cuando acepté.
Una vez que estuvimos todos en ronda, otra chica colocó una ruleta en el medio y la giro.
Que pase lo que tenga que pasar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Alrededor de las cuatro de la madrugada me encontraba ayudando a Hunter a subir las escaleras sin que se caiga.
Después de varios intentos, por fin llegamos a la puerta de nuestra habitación.
-¡Dije que no necesitaba ayuda!- espetó furioso.
-Te tambaleas para todos lados, idiota.
-No me importa lo que digas.- sus ojos brillosos estaban fijos en los míos.- No necesito que me cuiden y menos tú.- soltó demasiado cerca de mi rostro arrastrando las palabras antes de marcharse a quién sabe dónde.
Con un suspiro busqué las llaves e ingresé. La habitación estaba tal cual como me fui. Ropa y más ropa sobre mi cama deteriorada.
Después de acomodar un poco, me vestí con lo primero que encontré.
Una camiseta enorme.
Ya cansada, me terminé de desmaquillar, me metí en la espaciosa cama y me cubrí con las sábanas. No me importaba si quería que me marche, diga lo que diga no voy a dormir en la otra maldita cama.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Muévete.- oí a Hunter gruñir en mi oído.
Abrí los ojos de golpe y giré aún sin soltar la almohada entre mis brazos. Lo miré y negué con la cabeza somnolienta.
-Madison, fuera de mi cama.- ordenó.
-No.- solté infantil para luego girarme y darle la espalda.
Cuando estaba por caer profundamente dormida de nuevo, sentí la cama hundirse.
-Maldita sea.- susurró con voz ronca.
Hola❤️ ¡Si te gusta no olvides de votar y comentar!
