Por favor, no comparar historias o personajes de otras historias por el simple hecho de que se repitan ciertos nombres de personajes.✨
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Al segundo que oí un fuerte ruido, detuve mis pasos.
Apreté los labios y miré a mí alrededor.
Pero no había nadie.
Por un momento me quede allí aturdida hasta que reaccioné.
Salí tan rápido de la biblioteca, que por un instante sentí que se me iba a salir el corazón del pecho.
Aceleré mis pasos por el pasillo hasta que localicé la escalera. Subí corriendo a toda velocidad sin importarme si me tropezaba o no. Solo quería llegar a la habitación y no salir nunca más de allí.
Con las manos temblorosas, mientras corría, comencé a sacar las llaves de uno de mis bolsillos pero estaba tan acelerada que se me cayeron de las manos.
Me agaché para buscarlas pero inmediatamente me detuve cuando oí un ruido por el pasillo.
Sin pensarlo, me di vuelta hacia la escalera y en el preciso momento que Connor apareció en mi campo de visión, sentí que me iba a quedar sin aliento.
Apenas me vio sola en el pasillo, se detuvo para darme una sonrisa socarrona.
Por un momento pensé lo peor pero cuando lo vi echarse hacia atrás y bajar nuevamente la escalera, salí a toda velocidad hacia la habitación.
Una vez dentro, me aseguré de cerrar bien con llave y me desplomé cerca de la cama quedándome sentada en el suelo.
No pude ni siquiera cerrar los ojos porque se me venía a la mente la imagen de la sangre esparcida por el suelo.
No supe cuantos minutos habían pasado pero cuando logré tranquilizarme un poco, la sensación de temor volvió a invadir mi cuerpo.
Automáticamente me tapé el rostro con mis manos cuando escuché las llaves en la cerradura de la puerta.
Cuando la persona al otro lado giró la perilla, sentí mi corazón detenerse.
-¿Maddie?
Quité rápidamente las manos de mi rostro cuando oí aquella voz.
Sin pensarlo, corrí hacia él y apoyé mi cabeza sobre su pecho.
-¿Qué pasó? ¿Estás bien?
Agité la cabeza negando una y otra vez acurrucándome más cerca de él e inmediatamente me envolvió en sus brazos.
Nos quedamos allí parados en silencio unos minutos hasta que se alejó y pasó una mano por mi pelo.- ¿Me quieres contar qué pasó?
-En la biblioteca hay un cuerpo.-murmuré tras unos pocos momentos.
