Capítulo 65

1.4K 53 0
                                    

Cuando llegamos a casa la cara de Justin había empeorado. Tenía moratones por todos lados.

-Dios Justin... Lo siento mucho -Lloré -Siempre te pasan cosas malas por mi culpa.

-Espero que esta noche te haya enseñado a no seguir ciegamente a la gente como un pequeño cachorro. Ese bar era un lugar peligroso, _____. Creía que tenías mejores criterios de juicio.

-Bueno... no estaba tan mal.

-¡Oh venga ya! El bar estaba en un barrio malo y encima no os pedían DNI, ¿Qué clase de bar hace eso? ¡¿En qué estabas pensando?!

-Y-Yo no lo sé, ¿vale? Confié en que Will nunca me pondría en peligro.

-Bueno, pues lo hizo. ¡¿Te has dado cuenta de lo que te podía haber pasado?! ¡Iba a secuestrarte, y a hacerse dios sabe qué! Si no te hubiera seguido...

-Lo sé...Lo sé -Rompí a llorar más fuerte.

Justin se acercó a mí y me abrazó. 

-Ven aquí -Puso una mano detrás de mi cabeza y otra en mi espalda.

-Lo siento mucho Justin, siento mucho que hayas tenido que pelearte.

-Tranquila, ya se ha acabado.

-Gracias por salvarme... Otra vez... Te debo mi vida.

-Tienes una tendencia en ponerte tú sola en peligro, _____ ______.

Su comentario me hizo reír.

-No es intencional, lo prometo.

-Bien -Sonrió -Ves a dormir. Yo llamaré a la policía  y pondré una denuncia. 

Vaya noche... 

Estaba confundida. Estaba intentando convencerme de que Will no me había abandonado o no se había dado cuenta de que estaba en problemas. Pero, desafortunadamente, eso era lo que parecía. ¿A dónde había ido? ¿Y si algo le había pasado? ¿O de verdad me había abandonado o se había escondido mientras yo estaba en peligro? Suspiré. Decidí enviarle un mensaje a ver si me contestaba. Podía estar en peligro.

_____: ¿Will? ¿Estás bien? ¿A dónde te has ido? Justin me ha recogido. Escríbeme, por favor.

Subí a mi habitación para prepararme mientras Will me contestaba.

Mientras me preparaba, mi mente no dejaba de pensar en Justin. Era mi superhéroe personal, siempre estaba ahí para salvarme.

Me dormí pensando en él y en sus fuertes brazos rodeándome.

El profesor |J.B y tú|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora