El profesor |J.B y tú|

Capítulo 13

[_____ POV]

-Y entonces Tom me dijo que no podía salir conmigo porque iba a cuidar de su abuela -Dijo Laura mientras yo intentaba hacer los ejercicios del libro.

-Lau, no te estoy escuchando, intento hacer esto -Le dije cansada. No me malinterpreteis, me gustaba que Laura me contara todo, pero no creo que este sea el mejor momento para hacerlo.

-Señorita _____, apreciaría que se callara mientras estoy explicando algo importante al resto de la clase.

-Señor Bieber, yo no estaba...

-Primer aviso, señorita _____. Dos más y se va castigada -Se dio la vuelta hacia la pizarra y volvió a explicar.

-Lo siento... -Dijo Laura a mi lado -En cualquier caso... Entonces Tom me dijo que no podía salir conmigo y hemos quedado mañana -Volvió a contarme la historia como si nada hubiera pasado.

-¡Laura, cállate pesada! Vas a hacer que nos castiguen a las dos -Grité.

-¡Esta castigada, señorita _____! -Dijo Justin sin darse la vuelta -Después de la escuela se queda aquí conmigo.

-_____, no me delates por favor, tengo que ir a esperar a mis padres al aeropuerto -Susurró Laura a mi lado.

-Vale, pero me debes una muy grande.

-Lo sé, lo siento mucho, yo y mi gran bocaza.

El resto de la clase la pasamos calladas. Y cuando por fin se acabó, Laura se fue corriendo despidiéndose con un beso mientras que yo me quedaba a solas con Justin. La verdad es que se tomaba muy enserio su trabajo. 

Me pasé toda la hora mirándole, creerme cuando os digo que intenté centrarme en los deberes, pero siempre acababa mirándole, ¿Es que cómo no iba a mirarle? Su cara parecía estar tallada por los ángeles y su cuerpo por el propio Miguel Ángel. Vale, ya estaba desvariando. Necesitaba salir de aquí.

-¿Necesita ayuda con algo, señorita _____? -Su voz me sacó de mis pensamientos.

Oh mierda. ¡Me había pillado mirándole! ¡Qué vergüenza!

-Uhm...No, estoy bien, gracias.

-Bien.

La verdad es que no entendía muy bien porqué me había castigado solo por hablar. Vamos, no era la única que estaba hablando. A lo mejor sintió que debía probarme lo serio que era en su trabajo porque yo vivía con él o a lo mejor era como una señal para que dejara de fantasear con él o que me tenía manía. La verdad es que no sabía que pensar.