"𝑪𝒐𝒇𝒇𝒆𝒆" ,𝑿𝒖 𝑴𝒊𝒏𝒈𝒉𝒂𝒐

D o c e

Ya pasaron casi dos semanas desde que aquél chico visita la cafetería,y a decir verdad,ya me acostumbré a su presencia en la mesa número ocho,a que traiga los mismos libros cada día y a que siempre pida un café con un tostado.

—¡Hana!—gritó Xiumin,borrando mis pensamientos—¿Qué piensas?
—¿Ah?,nada nada ¿Qué ocurre?—pregunté.
—Creí que habías muerto o algo,estaba contándote mi bella historia de cómo me confundieron con una celebridad y al ver que no contestabas te grité.
—Estoy muerta,de hecho mi amigo Charly está a tu lado—dije sin expresión alguna.
Él mira a su lado derecho y luego a su lado izquierdo,después me mira a mí.
Yo río estúpidamente mientras veo su rostro inexpresivo.

—¿Porqué tantas risas?—preguntó Rosé apareciendo de la nada.
—Nada,es que mi amigo Charly es muy gracioso—le contesté a Rosé.
—¿Charly?—dice Rosé confundida—Ahora Xiumin se llama Charly,que clase de nombre es ese.
—Primero no me llamo Charly,y segundo vámonos de aquí—dice Xiumin tomando de los hombros a Rosé y llevándosela.
—¡Hey! No me dejen aquí sola—Les grito a los dos que se adentraron en la cocina.
—No estás sola.
—¿Charly?—pregunté
—¿Qué?¿Quién es Charly?—dice Jinyoung detrás mío.

Por primera vez,llegué temprano al trabajo,por lo que no hay clientes y tampoco llegaron nuestros compañeros,a excepción de Rosé,Xiumin,Jinyoung y yo,que comenzamos a ordenar algunas mesas.
Luego de unos minutos todos empezaron a llegar y,con ellos,los primeros clientes,hoy me tocaba ser mesera nuevamente,pues la cocina no es lo mío.

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Pasó la mañana y se hicieron las 15:00,la cafetería estaba casi vacía exceptuando algunos clientes que llenaban el ambiente con sus murmullos y ruidos de tazas.

Sonó la campanita de la puerta y aquél chico se asomó por la misma. Entró a paso lento,mientras sostenía en sus brazos los mismos libros que llevaba hace casi dos semanas atrás. Se sentó en la mesa ocho,como era de esperar.

Bajé de la silla alta de la barra,acomodé mi delantal y fuí hasta aquélla mesa.

—Buenas tardes—saludé sacando mi libreta.
—Hola señorita—saludó amistosamente.
—¿Va a pedir lo mismo de siempre?
—¿Qué es "lo mismo de siempre"?—pregunto él con curiosidad.
—¿Un café y un tostado?
—No se acostumbre a lo habitual,algún día podría sorprenderla—dijo abriendo uno de sus libros.
—Supongo que tiene razón—contesté.
El rió levemente
—De todas formas,sólo voy a pedir café,hoy es domingo,así que hay promoción—dijo él.
—Ah... Sí,claro la promoción,lo había olvidado—dije tocando mi frente—Va a estar en unos minutos.
Me retiré rápidamente,sinceramente ya me había olvidado de la famosa "promoción" y esperaba que él también lo hiciera.

Llegué a la cocina y le pedí a uno de los chicos el café y el tostado.
Salí de ésta y comencé a acomodar alguna que otra silla de mesas vacías. Luego de algunos minutos,pasé por la cocina para chequear si lo que pedí estaba listo y así fue. Llevé los platos con el café y el tostado a la mesa del chico.

—Aquí esta su pedido—avisé,mientras acomodaba los platos sobre la mesa.
—Gracias—me miro sonriente.
Estaba a punto de irme pero el tomó mi brazo,como la otra vez. Me provocó una especie de sensación indescriptible.

—¡Hey!...¿Cómo te llamas?—preguntó.
—¿Disculpe?—enrojecí
—Lo siento,fuí muy atrevido—se disculpó mientras soltaba mi brazo.
—Hana—dije señalando el cartelito que llevaba en el delantal.
El sonrió con sus mejillas rosas.
—Creo que nunca se me ocurrió mirar el cartel,lo siento—rió un poco.
—¿Cuál es el motivo de su curiosidad?—pregunté sonriendo sin mostrar los dientes mientras cruzaba mis brazos.
El enrojeció aún más—Pues... La verdad...—pensó por unos segundos mirando al techo—No quiero seguir diciendote "Hey" o "señorita".
Por mi parte estaba feliz.
—Esta bien—dije volviendo a sonreír—Disfrute su comida.