Luego de la última persona que vino a cobrar no vino nadie más,por lo que estaba en un estado de aburrimiento total. Tomé los papelitos adhesivos de colores que hay sobre la mesa de la caja y una lapicera,empecé a escribir pequeñas cosas para mis compañeros,algunas con dedicatorias,otras un poco tontas y en otras solamente hacia dibujos o intentos de dibujos. Comencé a pegar todos los papeles sobre la mesa y sobre la caja también,es bastante divertido y lindo. Creo que voy a comprarme uno de estos papeles para pegar en casa.
—Hola—dijo alguien sentándose en la barra. Levanté mi mirada.
—¿No tomaron tu orden?—pregunté mientras bajaba la mirada y dibujaba una florecita en el papel color rosa. —A decir verdad no,creí que era mejor sentarme aquí... Así me verías y tomabas mi orden—decía rascando su nuca y mirando hacía otro lado. En eso veo que Eunbi pasa y me guiña un ojo como siempre,"tonta" pensé. —Sabes que podrías levantar la mano y te vería cualquiera—dije concentrada en mi dibujo. —Tienes razón,pero quería que tú me atendieras,además la ventana le da un toque más natural a este sector,es agradable—contestó sonriendo ampliamente. Quité mi mirada del dibujo y lo miré. —Bien,entonces...¿Qué vas a ordenar?—pregunté. —¿Está bien ser cajera y mesera al mismo tiempo?—preguntó mientras apoyaba su rostro sobre su mano y me miraba. Yo fruncí el ceño volviendo a prestar atención a mi dibujo —¿Debería considerar eso como una queja? —No,de ningún modo—rió un poco.
—Quiero un café—dijo luego de unos segundos. —Bien—dije sin mirarlo. —Y un par de donas,también— —Genial. Dejé de dibujar en los papeles y fuí directo a la cocina a pedir la orden.
—Un café y dos donas ¡Por favor!—Grité. —¿Tú no estabas en la caja?—preguntó Seokjin. —Así es. —¿Y por qué vienes a pedir una orden?—preguntó confuso. —Alguién se sentó en la barra y dijo que nadie tomó su orden... Como sea,un café y dos donas. Dije para luego salir de la cocina y sentarme en la barra justo detrás de la caja.
Miré mi reloj de mano 15:23 p.m aún faltaba para que acabara mi turno. Esperé a que las donas y el café de Minghao estuviesen,sin embargo esos minutos fueron totalmente incómodos,¿Era necesario que mirase tanto?.
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—"Donas y café listos"—escuché la gloriosa voz de Seokjin (aunque no era tan gloriosa). Dí un pequeño salto para bajar de la silla y caminé hasta la cocina para tomar la bandeja con los alimentos,volví y los puse sobre la barra. —Aquí está—dije acomodando el cafe con las donas. —Gracias. Me volví a sentar en la silla.
Luego de un rato,otro cliente vino a pagarme,entregó su ticket,junto con el dinero. —Disculpe,me dió dinero de más—dije entregándole los $10 que sobraban. —Oh,gracias—contestó la anciana—no veo bien sin mis lentes—rió un poco. —No se preocupe,mire son $35 del tostado y $25 del té,lo que sería $60 usted me dió $70—dije sonriéndole amablemente,me gustaba tratar con gente mayor.
Miré de reojo y Minghao estaba mirando con atención la escena. —Gracias querida,gracias— —Adiós vaya con cuidado...— Miré mi reloj y marcaba 15:41 p.m.
Levanté mi vista y pude ver como mi acompañante seguía mirando. Apoyé mi barbilla sobre mi mano,ya un poco cansada y lo miré. Así se inició una pequeña batalla de miradas que no duró mucho ya que él quitó la vista tomando un sorbo de su café.
—Gané—susurré. —¿Disculpa?—preguntó él,que alcanzó a oírme. —¿Dije algo?—sonreí burlonamente. El sólo se dedico a tomar otro sorbo de su café. —Eres bastante diferente...—soltó de la nada yo lo miré rápidamente y mi rostro hacia una mueca que denotaba gran confusión,el se dió cuenta de eso—Quiero decir... Que eres muy diferente a las chicas de aquí en algunos aspectos—dijo para luego lanzarle un bocado a su dona—Sin ofender... Porque no me estoy refiriendo a nada malo,por supuesto—agregó aún con la boca llena. Yo lo seguía mirando esperando que dijera algo más,sus mejillas se iban ruborizando lentamente. —Es decir,creo que tu tez es bonita,tus ojos también son bonitos... Y creo que tú eres bonita—dijo moviendo sus manos para todos lados mientras tartamuedeaba alguna de sus anteriores palabras,yo reí un poco—Lo que quiero decir... es que en realidad—suspiro fuertemente mientras le daba un bocado a su dona—Olvídalo—volvió a hablar con su boca llena. Reí fuertemente ya que verlo nervioso me parecía realmente adorable. —Como sea,olvídate de esta charla,me siento avergonzado— —¿Nunca te dijeron qué cuando te avergüenzas eres increíblemente tierno? Sus mejillas comenzaron a teñirse de un rojo más fuerte,solté una risa boba.
Él se levantó ya que había terminado su café,me entregó el ticket con el dinero correspondiente,y yo le di el vuelto —Toma—dijo pegándome uno de esos papelitos adhesivos en la frente.
