Capítulo 5

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  • Dedicado a Micaela Giangreco
                                    

Sebastián

Realmente a veces no sabía qué sentía por Sara. Tal vez era costumbre o una forma de sentirme menos solo.
Estos fueron los pensamientos en los cuales divagé mientras seguía besándola hasta que se apartó bruscamente. Cuando decidí preguntarle el porqué, me encontré con un par de ojos conocidos. ¿Qué hacía Micaela aquí? Pero sobre todo ¿Por qué estaba con Erick?

Todo pasó tan rápido que de un momento a otro, los cuatro nos encontrábamos en la misma mesa. No hace falta decir lo que pasó ¿No? Con una palabra alcanza y sobra. SARA.
Gracias al cielo, se encontraba más callada de lo normal y eso era bueno, aunque no el silencio sepulcral que caminaba sobre nuestras vértebras y presionaba nuestros cerebros en busca de algo por decir.  Tomando un sorbo de café, me decidí a hacerlo. Ya era hora que alguien diera el primer paso. ¿No?

---- ¿Qué tal Mar del Plata?----. Le dije a Erick para luego dirigir mi mirada hacia Micaela.

---- Creo que está más linda que antes. Siempre es un placer ver el mar----.  Sonriendo, la miró de soslayo y ella le devolvió el gesto.
No quería y no debía, pero sentía celos de su interacción. Quizás era un poco exagerado, pero no podía negar  que me atraía.

---- Sebastián... ¡Sebastián!

----¿Qué pasa? -----. Con una sonrisa tensa, esperé no hacer otro papelón.

----Amor, les estaba comentado a Erick sobre nosotros y el proyecto que tenemos de bailar juntos para el concurso ya que indudablemente necesitamos un maestro para mejorar aquellos aspectos que no pudimos solucionar durante los ensayos---.
Nerviosamente miré a Micaela, y ella al encontrarse con la mía, solo atinó a bajarla.

----Nos encantaría que nos ayudaras porque creo que eres el indicado para corregirlos----.

----Me encantaría hacerlo, pero ya tengo mi tiempo libre ocupado para solo una persona y esa es mi nueva compañera de baile----. Guiñándole un ojo a Mica, fruncí el ceño. ¿De qué me había perdido?

----¿Nueva bailarina? ¿Se puede saber quién es?----.

----Micaela.

Ella solo asintió, pero sabía que si no salíamos de allí en cuestión de segundos, iría a saltar por encima de la mesa para herir a Micaela, y es lo que menos quería. Tomando una tarjeta de mi billetera, se la ofrecí a Erick para darle todos mis datos en el caso de surgir un nuevo encuentro.

--- Un gusto conocerte---. Fue lo último que dije antes de tomar la mano de Sara y sacarla prácticamente a las rastras de allí antes de la bomba explotara.

---- ¡¿Qué haces?!----.

---- Irnos. ¿No es obvio?----.

---- ¿Vas a dejar que esa no quite la oportunidad que tanto hemos querido tener? ¡No es nadie! ¿No has visto cómo va vestida? Se nota que es una perdedora----.

---- ¡Basta! ¡O cierras tu maldita boca o no me diriges la palabra nunca más!----. Exploté sintiendo cómo mi rostro quemaba de la rabia que me produjo escucharla. ¿Qué derecho tenía para hablar de otra persona así?

----¿Qué sucede amor? ¿Acaso te gusta?----.

----¿Estás escuchando lo que dices? Mejor me voy----. Tratando de librarme de aquella mujer insoportable,  ella fue más astuta y me tomó del brazo para mirarme directamente a los ojos y decirme:

----Es mejor que no te guste porque te haré la vida imposible a ti y a ella si ese es el caso----. Cuando pensaba decirle lo absurda que sonaba aquello, me plantó un beso desesperado en la boca y se fue dejándome más confundido que nunca.

Micaela

Creer en las personas y que luego te decepcionen dolía y mucho. No obstante, este dolor que sentía ¿era por qué él me decepcionó o había algo más?

----Un peso por tus pensamientos----.

----¿Qué decías?

----Que me gustaría saber qué piensas. Estás muy pensativa----.

---- Nada que importe, Erick----. Al bajar mi mirada, me delaté.

---- Si no presiento mal, debe ser por amor----. ¿Era demasiado obvia?

---- ¿Qué? No, estás mal----.

----Vamos, Mica. O me vas a decir que este chico, Sebastián, no te gusta----.

Mis mejillas debían estar más rojas que un tomate, pero no sabía si era necesario decir algo cuando era más que evidente mi aptitud.

----Las miradas que compartieron fueron las causantes de esto. Y en mi humilde opinión, deberían luchar por lo que sienten---.

----La mujer que lo acompañaba es su novia. ¿No lo recuerdas?----.

----Una vez que se aburra, se irá y te dejará el camino libre----.

---- No es tan fácil como parece, Erick----.

----¿Por qué lo dices?

----Él me prometió bailar conmigo para el concurso, pero hoy sin embargo te pidió ayuda para bailar con su novia, para este----.

----Por ahí va el asunto....---- Tratando de mantener el rostro serio, poco después sonrió.---- El tiempo permitirá entender la razón de por qué sucedieron así las cosas. Mientras tanto, me tienes a mí----.

----Gracias. Si hubiese tenido un hermano, me hubiera gustado que fue como vos----.

---- En mi caso, me hubiera gustado en contrarla----. Bajando el volumen de su voz, trató de evitar que lo escuchara pero lo hice.

---- ¿Tu hermana? ¿Qué pasó con ella?

----¿Realmente quieres saberlo?----. Apoyando mi mano sobre la suya, le di fortaleza----Resulta que mis padres  dieron en adopción a mi hermana menor cuando yo tenía 3 años por razones económicas y ahora, luego de tanto tiempo, de tanto esfuerzo y de dinero, nada ha cambiado----.

----No hay que perder las esperanzas, la vas a encontrar----. Levantándome de mi asiento, lo abracé y pensé en la posibilidad de ayudarlo. Si podía cumplir mi sueño, ¿por qué el suyo no podría llevarse a cabo? 

Mi último baileDonde viven las historias. Descúbrelo ahora