Mica
1 semana después
----¿Cuándo dejarás de esconderte?----.
Suspirando me recosté en mi cama sin nada que hacer. Realmente no tenías ganas y menos con el corazón roto.----No me estoy ocultando, solo estoy evitando la realidad----. Contesté, tomando mi celular. Hace días que lo tenía en silencio por las llamadas y mensajes que cada día me mandaba Sebastián. Él era muy insistente pero sabía que con el tiempo lo inevitable iba a pasar.
----Entonces, ¿por qué no sales de esta habitación y vienes a tomar un café conmigo?----. Pensándolo por un rato, asentí con la cabeza. No me iba a caer mal tomar un rico café de Starbuck.
----Bien, acepto----.Levantándome, tomé mi chaqueta y mi pequeño bolso.
----Hace frío pero el día está muy agradable. Ya verás te va a levantar el ánimo salir conmigo- Sonrió, entrando al ascensor. Fingiendo una sonrisa, me dediqué a pensar en cualquier cosa. No quería preocupar a mi hermano pero mi alegría se había perdido desde hace días y no tenías muchas ganas de que volviera.
Entrando al cafetería fue agradable encontrar un ambiente casi silencioso.----Te espero en aquella mesa----. Caminando hacia ella con la mirada perdida en alguna parte del inmenso mundo de gente que caminaba por las calles, lo esperé varios minutos hasta que me entregó el café que quería.
----La chica que me atendió me dio su número y eso que no se lo pedí----. Guiñando un ojo, sonrió.
----Qué bueno... ----. Contesté, girando mi vaso de café entre mis dedos.
----¿Hasta cuándo vas a seguir así?
Hasta que Sara desaparezca de la faz de la tierra pero creo que es un deseo bastante complicado de cumplir.----Nada dura para siempre pero parece que lo tuyo sí----.Haciendo una mueca, tomó su café.----No es nada, pronto estaré bien.
----Sé que me ocultas algo y quiero saber.¿Qué sucedió además de que Sebastián estuvo en nuestro departamento?
- Bueno, yo...----. Suspirando pesadamente, pensé en si debía hablar con la verdad o más bien dejar que él siguiera pensado en cualquier cosa menos en que su hermana menor quería estar con un hombre que no solo se iba a casar sino que además podría llegar a tener un hijo con la bruja de Sara.----No sé si decírtelo. Tengo temor a tu reacción----.
----Ni que fuera a pegarte----.Rodando los ojos, tomó mi mano----Sea lo que sea, te voy a tratar de apoyar y ofrecer mi ayuda. Eres mi hermana, no una completa extraña----.
Sonriéndole, apreté mi agarre a su mano y con cierta valentía adquirida, respondí:----Puede que Sara esté esperando un hijo de Sebastián.
Dirigiendo mi mirada a un punto imaginario de la angosta calle, que se encontraba lleno de peatones sumergido en sus propios mundos, esperé por varios segundos que resultaron ser un infinitos hasta que Erick reaccionó.
----Realmente es grave pero.... ¿Por qué dices puede? ¿Acaso no es seguro?
----Sebastián no confía que sea cierto o que sea su hijo. Sabemos que ella no es de fiar.
----Puede que no sea de fiar pero principalmente a vos no te cae bien porque está con él. Creo que si antes te decía que debías alejarte, ahora como mínimo deberías irte del país----.
----¿Cómo?
----No lo malinterprentes, Mica. No quiero decir que te vayas pero ellos necesitan su propio espacio sin tensiones para pensar lo que está sucediendo. No quiero verte sufrir más, y sé lo que terminarás haciendo con esta situación.
ESTÁS LEYENDO
Mi último baile
RomanceEl baile cautivó a dos corazones que más tarde se unirían y formarían uno solo.