PROHIBIDA

CONFESIONES

Todavía intentaba entender todo lo que me había pasado en las últimas horas. Primero, había aceptado la idea loca de ir a una fiesta con mis amigas para que luego cada una se fuera por su lado dejándome sola. Bebí, lo que nunca hacía y aún seguía sintiendo un poco de dolor de cabeza cuando si mal no recuerdo, bebí muy poco. Para mejorar esa noche desastrosa, termino en la habitación de la dueña de la casa que se me insinúa como si fuera lo más normal del mundo, para ir directa al grano, ¿y que si era nueva?¿a qué se refería?, tengo que reconocer que estaba bastante bien, tanto que cuando la vi en el balcón seguro tendría una cara de idiota mientras la observaba. Una rubia explosiva con ojos penetrantes que me desnudaban sin ningún pudor. Lo último que recuerdo esa noche es su pregunta descarada,¿nueva en general?...pero que cazzo. Y otra cosa esa Mane, me había dejado sola en esa casa,inconsciente y con una desconocida ¡en su cama!,¿pero que clase de amiga era? Estaba deseando llegar a su casa para que me diera una explicación de todo porque no tenía ni idea en que rollos estaba metida con esa Daniela aunque posiblemente como con otros que iban a buscarla al barrio y posiblemente eran los que le proporcionaban una vida de lujo.

Señorita, hemos llegado-dijo Marco abriendo la puerta del coche para ayudarme a bajar-

Grazie mille por traerme-dije tímidamente-

Es un placer señorita, su amiga ya ha sido avisada de que venía, la estará esperando, que pase un buen día-dijo mientras se montaba en el coche-

Cuando llegué hasta el departamento la puerta estaba abierta y Mane estaba sentado en su sillón blanco mirando hacia la piscina que había en su ático de lujo con una copa de mimosa en la mano mientras fumaba un cigarro con una bata negra de seda.

Vaya...aquí estas...la que parecía tonta-dijo con arrogancia lo que me hizo molestarme más de lo que ya estaba-

¿En serio Mane? Después de haberme dejado tirada tu y Karime en esa casa con una desconocida,¿eso es lo que vas a decir?-bufé-

No me vengas de mosquita muerta Elettra que lo has disfrutado bien seguro-dijo levantándose del sillón para ir a la cocina a servirse más bebida-

¡Vaffanculo!¿pero de que cazzo estas hablando? ¡Tú y Karime fueron las que me dejaron sola en esa casa stronza!, ¿de qué iba toda esa fiesta Mane?-ella me miró con recelo mientras volvía a su posición anterior-

No sé de que chingada me estas hablando- contestó-

¿Qué negocios te traes con esa tal Daniela?¿a qué se refería con si era nueva?, quiero una explicación-dije furiosa-

No es asunto tuyo, limítate a ser la niña buena de siempre sin más-dejó la copa en la mesita y se quito para ir hacia la piscina ignorándome-

¿Es una de las que te pagan todas estas cosas no?-dije señalando todo a mi alrededor mientras ella me fulminaba con la mirada- ¿por eso eran esas preguntas?¿pensó que yo era igual que tú?-podía notar la ira en sus ojos- yo no me vendo por ropa cara y unos cochinos euros- y eso fue la bomba definitiva para verla ir hacia mi como una furia-

¿Ahora me juzgas?¿quién te has creído? ¡Hago lo que quiero,con quien quiero y cuando quiero!¡nadie me obliga a nada!para ser una santa bien que terminaste en su cama,¿a caso te obligaron?

¡Me había perdido stronza! Y luego me mareé por vuestra estúpida insistencia de beber

Nadie te obligo a nada Elettra, deja de culpar a todo el mundo y creerte tan perfecta. Para tú información estuve en esa habitación y si fuera por mi esa misma noche te sacaba a rastras, pero ella prefirió que te quedaras en esa maldita casa-ahora no entendía nada-

Eso no tiene ningún sentido-dije confusa-

Créeme, eso mismo pensé yo, porque tú y no yo-dijo en un susurro que conseguí escuchar mientras volvía a dar un gran trago de su bebida-