Alrededor de las cinco y media de la tarde acaban los ensayos pero, como es de costumbre, Ana nos ha pedido que lo dejemos todo más o menos recogido. Elisa, que es una mujer de costumbres, ha buscado una excusa para escabullirse, así que quedamos los tres de siempre.
- Es el primer y el último día que hago esto - me quejo.
- Pero si tampoco tenemos nada que hacer.
- Habla por ti. A mi me están esperan...
- ¿Cómo? - suelta Àlex si dejarme acabar la frase.
- Sí, de hecho debería a ir a hablar con él, no sé cuánto vamos a tardar...
- ¿Pero quién es? - me insiste.
Me aguanta la mirada unos instantes, intentando descifrar con quien me está esperando.
- ¡No puede ser!
Yo asiento con una sonrisa.
- ¿¡Por qué no has dicho nada!?
- Te lo estoy diciendo ahora - me defiendo.
- ¡Antes! - se queja.
- Estabas demasiado ocupado...
- ¿Chicos, os importa si me voy ya? - interrumpe Marta. -Tengo que recoger a mi hija de inglés y voy un poco justa de tiempo...
- Tranquila, ya acabamos nosotros.
- Muchas gracias. Nos vemos mañana.
- Espera - digo apresurándome detrás de ella - te acompaño a la puerta.
Ya en recibidor vemos a Timothée sentado en una de más butacas.
- Hasta mañana - nos despedimos de Marta.
- ¿Cómo vas?
- Mal, vamos mal. Lo siento muchísimo, no sabía que iba a tocarnos recoger. Lo entiendo perfectamente si quieres irte...
- ¿Qué? ¡No!
- ¿No?
- ¡No! Puedo esperar.
- Pero no sé cuánto vamos a tardar...
Timothée se frota la barbilla como si estuviese tramando algo.
- Tengo una idea. Vuelvo enseguida.
- ¿Pero dónde vas?
- Ahora vuelvo.
- No te vayas a perder...
- Tranquila - responde con una sonrisa.
Me vuelvo de nuevo con Àlex, que está barriendo.
- ¿Ya le has asustado?
- Muy gracioso... No sé dónde ha ido. Ahora volverá, o al menos eso ha dicho.
- Es solo una excusa para salir corriendo - se burla.
- Eres idiota - le digo tirándole una botella de agua vacía.
Nos ponemos manos a la obra y mientras Àlex sigue barriendo el plató, yo doy un repaso arriba, donde están los camerinos y la sala de maquillaje. De golpe escuchamos que aporrean la puerta.
- ¿Abres tú? - grito. - Debe de ser él.
- Voy - le oigo gritar
- Hola - saluda Àlex al abrir la puerta - Gigi está arriba.
- Genial, gracias - responde Timothée - ¿Todo bien? - le pregunta.
- No podría ir mejor...
Rápidamente me dirijo al primer camerino que encuentro y hago todo lo posible por arreglar mi aspecto.
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Decisive project.
Fanfiction'Decisive project' cuenta la historia de Gigi, una empleada de una pequeña productora de Barcelona. Hace unas semanas recibieron el fragmento de una película con la que pueden ganar popularidad en la industria. Desde entonces, los rumores acerca de...