La Profecía del Salvador Oscuro ©

Tomo 2: Capitulo 9

Su viaje por el camino de la noche había desembocado en un gran problema: los Penumburs estaban acorralando al septeto, y ahora solo faltaba que alguno de un paso en falso para que todos se conviertan en cadaveres

–¿Que hacemos Ostoc?– pregunto Aaron asustado, tratando de no moverse mucho

–N...no lo se– contesto el 

El punumbur que tenia sujeto a Olen comenzó a asfixiar a su victima, la impotencia invadía a los hermanos Ohlin, querían destruir a los Penumburs y salir de allí pero no olvidaban las palabras antes mencionadas "no conocemos forma eficaz de destruirlo" y eso los frenaba, pero no se podían quedar quietos, y no fue así, uno de los penumburs a sus espaldas se alzo sobre Aida, la cual comenzó a forcejear con aquella horripilante criatura

–¡Ayuda! –   grito ella solo una vez

Aaron en ese momento no se pudo contener mas y exploto sin pensar sus super habilidades, un aura super brillosa rodeo al adnato y sin siquiera pensarlo se abalanzo sobre la criatura y un rayo de energía salio despedida de su mano, ese rayo golpeo del lleno al penumbur quien soltó a Aida y salio vociferando algo inentendible. Aaron miro sus palmas sorprendido "claro, la Luz los detiene" la respuesta cayo en su mente como piedra en el fondo del agua

–¡Chicos! ¡La luz los quema!– grito el joven Adnato a su hermana y a Luk

Inmediatamente después de escuchar aquella valiosa información los dos Adnatos que se encontraban frente a Olen también ascendieron sus escalones provocando miedo en los penumburs, que como toda criatura que se siente amenazada respondieron al ataque de los Adnatos, pero Luna tenia un solo objetivo: Olen, y con el puño recubierto de energía lumínica esta chica ataco de un puñetazo a aquel penumbur quien también salio huyendo, mientras que Luk solo tuvo que crear una onda expansiva con su propia aura para terminar de alejar a las restantes criaturas, pasaron de estar al borde de la muerte a estar salvados, pero eso no significaba el fin de los problemas, la onda expansiva creada por Luk había sido con tal fuerza y magnitud que golpeo las paredes y techo del camino, haciendo que este primero comenzara a temblar para finalmente comenzar a desprenderse pedazos del techo y a derrumbarse, Aida se quedo viendo tal cosa como si de un espectáculo se tratara y Aaron agarrando a la niña de su brazo comenzaron a correr la salida, forzando a Aaron a dar un salto junto con Aida para evitar que una gran piedra los aplaste, logrando escapar con éxito por unas pocas milésimas de segundo de que el túnel terminara de bloquearse , Aaron vio esta escena y se dejo caer al suelo mientras jadeaba

–¿Están todos...bien?– pregunto Aaron quien seguía jadeando 

– Si , hay que seguir adelante– contesto Luna 

– Si...ya...ya me levanto, dos minutitos– contesto Aaron aun echado en el suelo

–En esta zona estamos expuestos– replico Orus mirando hacia todos lados –Si nos quedamos mucho llamaremos la atención, vamos–

El joven proveniente de Adnat finalmente se puso de pie y comenzó a caminar atrás de sus amigos, pero algo no andaba bien, si bien entendía que todo lo sucedido anteriormente era estresante y era normal que después de una situación así el cuerpo sufriera una "relajación" importante, pero Aaron se sentía demasiado cansado, su energía estaba muy apagada, era similar a los síntomas de un resfrió: debilidad, dolor de cuerpo y cabeza "¿Que me esta pasando?" se preguntaba Aaron quien cada vez estaba mas asustado, aun así decidió no darle importancia y apostar que tras unos momentos el problema desaparecería, la caminata ya llevaba un buen tiempo, Ostoc insistía en no usar ni un poco de energía porque la zona donde estaban era realmente muy expuesta y la energía actuaria como imán para mas problemas que querían evitar a toda costa, de pronto Luna giro su cabeza hacia atrás, su hermano estaba muy atrasado