De la oscuridad hacia la luz

Capítulo 4

Abro la puerta muy despacio para que mis padre no me oigan. De repente viene hacia mi una pequeña bola de pelo que no para de mirarme, es Nina, mi perrita. La aparto con cuidado, no estoy de humor para estar pendiente de ella. En respuesta a mi acción, Nina hace un gemido que hace que la mire.

-Venga, Nina, siempre consigues que te haga caso. Te dejaré esta vez-.

Nina parece que me entiende y se pone a dar vueltas intentándose atrapar la cola. Me imagino que eso será porque está feliz. Abro la puerta de mi cuarto y me tiro en la cama. Nina me persigue rápidamente y sube tras mía.

Intento relajarme y olvidarme de todo lo ocurrido. Pero al segundo me doy cuenta de que no sé si mis padres están en mi casa. Me levanto enseguida de la cama de un salto, lo que hace que Nina gire la cabeza, expresando preocupación.

Camino por toda mi casa. Mi casa es bastante grande con dos pisos y con jardín en la parte posterior.

No hay nadie, bien. Me voy a la cocina para almorzar. Cuando voy a abrir la nevera veo que hay una pequeña nota que dice " Tienes el almuerzo en el mircroondas, solo hace falta calentarlo, nos retrasaremos un poco, besos".

Pongo mi plato a calentar y lo saco. Como mientras veo por la tele un programa que va de buscar novio, que tontería, pienso. No hay nada más interesante en la tele  así que lo dejo. La chica está besando a un chico el cual solo lo conoce de una semana, que vergüenza. El chico que la está besando me hace que recuerde a Hugo. Cojo el mando rápidamente y cambio el canal, mejor dejo las noticias.

-Hoy se celebra la reunión de jóvenes católicos en Madrid. Miles de jóvenes se reúnen hoy en la plaza Mayor de Madrid...-dice la reportera-.

-¡Vaya por dios! Es que no hay nada en esta estúpida tele o que...- digo pulsando el botón del mando para apagarla.

Me voy a mi cuarto otra vez y enciendo el ordenador. Me siento, y me cubro con las manos mi cara.

Abro dos páginas de Google a la vez como hago siempre. Una para buscar las carreras de cine y otra para dejarla con universidades para Medicina. Hoy toca meterme en la página de New York Film Academy. Lo escribo en el teclado y hago click en el primer enlace que me aparece. El fondo de la página es rojo y tiene diferentes recuadros. Un cuadrado dorado en la derecha de la página me llama la atención. " 1 millón de profesionales cineastas viajarán por todo el mundo para acoger a jóvenes creativos para llevarlos a un campamento de verano, totalmente gratis" Mis ojos se abren con sorpresa al mirar esta noticia. Pero luego pienso " ¿Pasarán por mi instituto? Eso espero".

"Tock tock"

Debe de ser mi madre. Muevo rápidamente el ratón para cerrar la pestaña y quedarme con la de universidades de Medicina.

-Hola, cariño. Nos hemos retrasado un poco. Hoy muchas personas se han puesto enfermas... Mmm ¿Qué estás mirando?- me dice mi madre mirando con curiosidad la pantalla.

-Estaba mirando las universidades para estudiar Medicina-miento.

-Ah... Muy bien-dice con una sonrisa extensa-.

Se da media vuelta y sale de mi cuarto muy contenta.

"Uff, por los pelos" pienso