Capitulo 17

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—Alejandra— escucho a Carlos llamarme.

—Aquí— digo sacando la mano al pasillo para que sepa donde estoy.

—¿Que haces?— Pregunta entrando en el cuarto.

—Ayudando a Danesa y a Thomas a que se termine de acomodar— le digo con una sonrisa.

—¿Podemos hablar en privado?— pregunta un tanto agrio para mi gusto.

—Terminen de ponerse cómodos, están en su casa— digo saliendo detrás de Carlos.

Entramos a nuestra habitación y al cerrar la puerta exploto todo lo que al parecer se estaba conteniendo.

—¿QUE DIABLOS ESTÁS HACIENDO ALEJANDRA? — Me cuestiona.

—No grites que no estoy haciendo nada malo, solo estoy ayudando a alguien que lo necesita. — digo con toda la calma  que una persona puede tener.

—MALDICIÓN ALEJANDRA, ESTE NO ES UN MALDITO REFUGIO AL QUE PUEDES LLEVAR A TODO EL QUE TE ENCUENTRES EN LA CALLE, ESTÁ ES NUESTRA MALDITA CASA— Sigue gritando.

—Te dije que no me grites— le vuelvo a repetir con la poca paciencia que me queda.

—NO ME IMPORTA QUE AYUDES A MEDIO MUNDO SOLO NO LO TRAIGAS AQUÍ. ESTOY SEGURO QUE NI SIQUIERA CONOCES A ESA CHICA.— Dice con más gritos.

—MALDICIÓN TE DIJE QUE DEJES DE GRITARME. ¿ACASO A TI NUNCA TE DIERON UNA OPORTUNIDAD? ¿ACASO A TI NUNCA TE AYUDARON?— digo explotando, puedo sentir las lágrimas salir de mis ojos.

—SOLO NO TRAIGAS GENTE A MI CASA.— Dice aun sin dejar sus gritos.

—VOY A TRAER A QUIEN SE ME VENGA EN GANAS PORQUE ESTÁ TAMBIÉN ES MI CASA Y ELLOS SE QUEDARAN HASTA QUE YO LO QUIERA. Eres un idiota.— Digo cerrando la puerta de un portazo.

Me limpio las lágrimas y voy directo al cuarto de Danesa y Thomas pero no están. Camino hasta las escaleras y hay la veo terminando de bajar.

—Danesa. ¿A dónde van?— le pregunto.

—Le dije que no quería causarles problemas. Encontraremos algún lugar donde pasar la noche. — dice muy apenada.

—Tranquila no pasa nada, suban por favor y disculpen— les digo muy apenada por la actitud de Carlos.

—Por favor, solo quiero ayudarlos— les digo. Danesa asiente y sube.  Los dejo ya acomodados en la cama para dormir, mañana mandare a una de las muchachas del servicio a desempacar sus cosas.

—Si necesitan algo estoy en la habitación al final del pasillo.— Le digo y me voy a mi habitación.

Entro a la habitación Carlos no esta en la cama, entro al baño y hay está saliendo de la ducha. Me quito mi ropa y entro a la tina cuando el sale del cuarto de baño.

Me dejo llevar en el agua caliente de la tina porque necesito relajación, estoy muy estresada gracias a Carlos.

Creo que sí; mi peor error sin duda alguna es haberme enamorado de él y ni siquiera se como paso. Solo sé que lo que siento por él no es simple atracción, deseo, es más.

Los palpados empiezan a pesarme por  los voy cerrando, hasta que me quede dormida en la tina.

Narra Carlos

Cambio los canales pues la película que estaba viendo ya termino.

Tomo mi teléfono de la mesita de noche para ver la hora, sonrió por la foto de Alejandra en mi fondo de pantalla, es muy hermosa. Ver su foto hace que recuerde que no ha salido del baño y ya lleva casi dos horas.

Casados Por Un BebéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora