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Suga

Me miro al espejo mientras decido qué ropa ponerme para mi cita con Jimin.

Llevo años con él, no entiendo la razón por la que estoy tan nervioso, simplemente no quiero fastidiarlo. 

Lo que le dije ayer fue cierto, me creí a todas esas personas que me decían que Jimin se merecía a alguien más educado y exitoso, no al pobre rebelde de barrio. Pero aquí estoy, a punto de salir a cenar con él en un restaurante, comida por la cuál ha pagado Jeon. No estoy en posición de discutirle nada porque ando justo de dinero, además de que estoy seguro que ha sido JK con buena intención. 

A partir de mañana intentaré descubrir más sobre el plan de Bunny Killer, de momento no sé nada más así que tampoco he hablado con Taehyung. Hoseok no me ha informado de nada raro, por lo tanto todo va bien, todos estamos seguros por el momento.

Oigo como la puerta se abre y Jimin me pilla probándome dos corbatas encima de la camisa blanca.

-Wow, Min Yoongi el empresario. ¿En qué puedo servirle, señor?

Mierda, Suga, no te sonrojes.

-¿Es demasiado elegante?-digo con un poco de preocupación- he estado eligiendo entre varias cosas, pero no sé exactamente la opción más adecuada para...

Su risa me interrumpe, veo como encoge sus hombros y se tapa la carita con la palma de la mano.

-¿Por qué tanto apuro, hyung? Sólo vas a ir a cenar conmigo-se acerca para envolver sus brazos en mi cuello.

-Precisamente por eso, tú eres a la única persona que quiero impresionar-hago un puchero mientras le doy un beso de esquimal con mi nariz.

Agh, este niño me hace sacar mi lado más tierno.

Jimin ríe otra vez y juro que es la sinfonía que dará la paz en la Tercera Guerra Mundial.

-Puedes ponerte la corbata negra, así iremos a conjunto-me susurra justo en los labios.

-Mm-es el único sonido que soy capaz de articular.

-Sabias palabras, hyung.

-Te quiero.

Rompo los centímetros que hay entre su boca y la mía para darle un simple pico inocente.

-Vamos, termínate de vestir que ya son las diez, te espero fuera. ¡Y yo también te quiero!

Jimin grita mientras sale corriendo de la habitación con una sonrisa, dejándome a mí con otra igual. 

Va a ser una noche genial.





Taehyung

Me despierto de mi siesta de seis horas y miro el reloj, son las diez de la noche. Debo prepararme para ir al parque a las once, tal como he quedado con Suga.

No pude dormir nada anoche, me volvió a pasar, volví a soñar con él. Con mi padre.

Estaba en el sucio y viejo sofá, vestido solamente con una minifalda y unos calcetines hasta la rodilla. Veía a este señor que era llamado mi padre hacerse pajas y a punto de correrse con simplemente mirarme en ese estado: llorando, débil, medio desnudo, como su "pequeña princesa".

Pero yo bien sabía que esto no iba a terminar así. Él pararía antes de llegar al límite, porque quería correrse dentro de mí. Para demostrarme que era suyo, que siempre dejaría una marca en mí.

Antes de eso me comía con la boca, restregaba su asqueroso pene contra la minifalda. Chupaba mis lágrimas de dolor y asco. Tenía ganas de vomitar, quería correr lejos de allí y evitar que me tocara.

faded; vkookWhere stories live. Discover now