EN DEFENSA DE LA NOCHE

165 17 17
                                    

Noche,

te recuerdo desde siempre;

desde tenebrosos relatos

a infantiles reminiscencias.

Aterradora reputación

que se ha sembrado en tu nombre.

Hoy, soy testigo,

de que no todo es verdad,

soy tu fiel defensor,

porque en ti he alojado tantas noches,

y de ti, sólo he recibido acogida,

consuelo y comprensión.

En tus brazos he llorado,

he reído, he cantado y he bailado

con locura cuerda de mis cavilaciones.

Noche,

no se te puede acusar de todo,

es injusto el prejuicio en tu contra;

si pudieran conocerte a fondo,

disfrutarían de ti, como muchos.

Tu falta de claridad no es tan cierta,

si algunos, nos reconocemos mejor a obscuras.

Yo abogo por ti, noche,

porque seas sobreseída

de todos los cargos que te acusan,

de delitos y crímenes que no has cometido;

porque, bien sabemos,

que donde hay hombres,

hay maldad por naturaleza.

DE AMOR Y DE MUERTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora