El candor de la vida se incinera en tu voz,
cuando no puedes darle lo que encierra tu amor.
El dinero no puede atarte un grillete a los pies,
que se convertirá en bebida, en drogas, y tal vez, en placer.
La sofocante imposición de una caricia que va y viene,
soslayando tu corazón al extremo,
el espejo que dibuja una sonrisa tímida y temerosa
que no se borrará fácilmente.
Los moretones no desaparecerán con un frío baño,
se irán contigo, a donde vayas, y contigo morirán.
Puedes tomar tu vida como un simple juego de dar y recibir,
pero, quizás no te guste lo que recibas.
El amor es duro cuando lo que menos existe, es amor;
un templo que se degrada con violencia iracunda de tu victimario,
que te teme, y que teme a sus propios miedos,
y quien, por cobardía agrede con su puño manchado.
Los vestigios del hombre salvaje son imborrables
estigmas que permanecerán impunes,
mientras existan hombres con machismo desenfrenado.
Este amor iracundo, se consume en su tormento
de mentiras y engaños, y por desgracia, uno de ellos debe pagar.
*(Sea éste, un reconocimiento en apoyo a toda Mujer Violentada existente, para que 'el nunca más', sea definitivo y ningún cobarde vuelva a alzar su maltrato físico o psicológico en contra de alguna de ellas. ¡Hay que detenerlo ahora!)
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DE AMOR Y DE MUERTE
PoetryPoemario descarnado, a veces, frágil y tierno, que contempla un aspecto particular sobre estos dos conceptos, pero, profundizando a ratos en aquello que se oculta o se mantiene en las tinieblas, o como simples tabúes sociales, que invitan a uno y/o...