Tu concepción de la vida deja mucho que desear,
cuando, por un lado, satanizas el aborto,
y exiges la pena de muerte para otro, igualmente, humano.
Tu percepción irracional de las cosas lleva a autodefinirte como liberal,
contrastando con tu gen conservador.
¿Con qué derecho osas arrebatarle tan preciada libertad sobre su propio cuerpo?
¿Acaso, alguien te prohíbe el fanatismo inútil de tu exclusiva masonería,
la acumulación exagerada de tu mezquina riqueza,
la desvergonzada injerencia de tus leyes ilícitas,
tu inmundo atropello a los derechos humanos,
la impura conducta en tus propios burdeles,
en complicidad con pederastas,
y una iglesia que se retuerce por dentro, vejada desde sus orígenes?
¿Acaso, tu opulencia fue forjada con probidad ética y moral,
sin derramamiento de sangre en los campos de esclavitud,
en las tierras saqueadas, en los pueblos exterminados?
¿Con qué derecho te opones a que el hombre actual y la mujer valiente,
sobreviviente de su atroz discriminación, busquen sus formas libres de amar,
liberen sus sueños oprimidos, y propicien con ello, la integración?
¿Es acaso, esa fe impúdica, parte de la ignorancia heredada de tus antepasados,
de generación en generación?
La especie humana, inevitablemente,
traspasará las fronteras que interponga la estrechez intelectual.
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DE AMOR Y DE MUERTE
PoetryPoemario descarnado, a veces, frágil y tierno, que contempla un aspecto particular sobre estos dos conceptos, pero, profundizando a ratos en aquello que se oculta o se mantiene en las tinieblas, o como simples tabúes sociales, que invitan a uno y/o...