Estaba agitada de tanto correr, uno de los chicos con los que iba se encontraba apurado buscando algun tipo de artefacto, simplemente no lo sabia, a decir verdad llevaba soñando lo mismo algunos meses seguidos sin importar la causa o la razon, pero cada vez que lo hacia era diferente, al menos los escenarios, pero los mismos protagonistas. No recuerdo a ciencia cierta sus caras. Esta ocasión era diferente a la anterior puesto que alguien tomaba mi mano mientras corriamos, tan solo recuerdo las llamaradas que salian de un salon donde habia demasiadas cosas, no me pregunten que eran por que ni yo misma lo se, tan solo veia que todo se calcinaba como si se tratara de cosas hechas de azucar.
Eramos perseguidos por algo o por alguien, mi piel estaba algo tiznada por la ceniza que se esparcia por el aire, ese fuego era de lo mas demoniaco a mi punto de vista puesto que aunque alguna vez habia visto un incendio jamas tales llamas, pero sobre todo la forma que esta adquiria era lo mas parecido a la de una serpiente. Uno de los chicos con los que iba en ese momento giraba a la derecha indicandonos que debiamos de seguir por ahí, mientras que el otro estaba tomandome de la mano mientras me sonreia, creo que ese tipo de sonrisa ya la conozco aunque a el todavia no.
No teniamos salida alguna por lo que intentamos correr por todos lados hasta que nos topamos con aquellos tres, otros individuos nos estaban persiguiendo para tal vez asesinarnos, yo unicamente los vi, estaba preguntandome la razon por la que iban tras nosotros pero creo que no habia tiempo para siquiera una charla decente. Tan solo me limite a seguir a mis compañeros, trepamos en un pilar de libros y cosas como desesperados, no era que yo no fuera intrepida o mucho menos sino que tal vez no estoy acostumbrada a realizar demasiada fuerza fisica o demostrar una agilidad sorprendente.
Por fin subimos al pilar de libros, pero notaba que las llamaradas estaba creciendo cada vez mas y amontonandose para darnos un fin atroz y despiadado, yo estaba a punto de gritar, de correr, de salir de esa escena pero no me fue posible, tan solo recuerdo que nuestros perseguidores se encontraban en la misma situacion pues estaban tratando de alejar las llamaradas de aquel lugar. En cierta manera me compadeci de ellos ya que se veian demasiado jovenes, y nadie merece la muerte a esa edad, aunque no los veia o ni siqiera los distinguia tan solo podia sentir la desesperacion misma. Le decia a uno de mis acompañantes que hicieramos algo para rescatarlos pero al parecer lo dudaba, ¿Acaso se duda en una situacion como esta?, bueno, el lo hizo, asi que decidi tan solo esperar, ya que aunque yo hubiera querido definitivamente seria de lo más inservible para ayudar siquiera.
El chico que me tomaba la mano al parecer los detestaba pues constantemente le decia al otro que no debiamos siquiera pensar en rescatarlos, eso a decir verdad me parecio demasiado bajo, cualquiera que fueran sus intenciones con nosotros nadie merecia una muerte atroz. Por otro lado algo demasiado descabellado paso por mis ojos, ¿Escobas voladoras?, ¿Qué clase de alucinacion era esta!. Bueno creo que no teniamos muchas opciones ante la quemazon que estabamos sintiendo pues pude sentir de repente que mis pies calaban un poco con el fuego.
Sin quererlo tan solo trepabamos literalmente a esas escobas para emprender el vuelo, por alguna razon no era una sensacion desconocida, alguna vez habia estado en una escoba, solo que no recuerdo ni el lugar ni el momento. El chico que me tenia tomada de la mano me subio a una de ellas y comenzamos a volar hacia la salida, bueno, claro, si a un hueco de diez metros de diametro se le puede llamar asi, aunque en tiempos de guerra, cual quier agujero es trinchera y en este particular caso, era una salida. De repente observaba que un de los chicos que nos perseguian al principio caian al fuego, tan solo cerre un poco mis ojos para no observar demasiado tiempo aquella escena.