Donde Fuego Hubo...

Capitulo 3

POV Any

Mientras veía por la ventana no pude evitar que mi mente comenzara a viajar a esa época de hace años en la que yo era tan joven, inocente e ingenua. Me deje engatusar por un playboy experto y enserio llegue a pensar que me había amado a pesar que nunca me lo llego a decir con palabras. Después de la noche que lo conocí Diana me dio a entender que ella estaba más que interesada en él y que un día iba a ser de ella. Yo solo le había dado la razón, pero secretamente estaba pensando que él ya me había besado y no parecía estar para nada interesado en ella. Poncho y yo comenzamos andar a escondidas de todos ya que según el "lo nuestro era especial y no quería que nadie lo arruinara". Ahora estando más grande me doy cuenta que el solo me había dicho eso para que siguiéramos siendo "novios" con los beneficios de novios, pero a la vez el podía seguir haciendo lo que se le pegara la gana. Mi relación con Poncho desde un principio fue muy sexual. Lo hacíamos cada que se nos daba la oportunidad ya fuera en mi cama, en la suya, en la de los hoteles, el sofá, el comedor, el suelo, la cocina y una vez hasta en el baño de un antro. Parecía que éramos conejos y no podíamos mantener las manos apartadas el uno del otro, aunque cuando estábamos con otras personas nos tratábamos de contener. Aunque siempre había los jueguitos debajo de la mesa ya fuera con el pie o con las manos. A pesar de que era muy sexual tampoco me podía quejar porque Poncho siempre se aseguraba que el "romance" nunca faltara en la relación. Salíamos y hacíamos cosas de parejas y en esa época estaba profundamente enamorada de él. Diana por su parte se le lanzaba a cada oportunidad que podía y una que otra vez notaba que Poncho le hacía caso y flirteaba con ella. Eso me molestaba y siempre terminábamos en una gran pelea en las cuales el solo me decía que lo nuestro era secreto y si no quería que nadie sospechara él tenía que seguirle la corriente de vez en cuando. En ese tiempo como una tonta había caído en su juego, pero ahora me sabía que solo era el comienzo de la más grande de las traiciones. Mi mente inevitablemente me lleva a uno de mis más preciados momentos junto a Poncho.

*flashback*

Mi familia y la de Poncho habían decidido tomar una vacación "familiar" que había propuesto Diana. Lo más seguro es que las dos familias ya estaban planeando la boda de Diana y Poncho así uniendo las dos familias y empresas de una buena vez. No podía negar que eso me irritaba sobremanera ya que todos asumían que Diana era la mejor pareja para él y a mí me dejaban a un lado como una apestada. Esa tarde Poncho y yo decidimos adelantarnos a todos y dar un paseo en la playa. Jugábamos y reíamos mientras los esperábamos u juro que nunca había sido tan feliz como ahora.

Any: Poncho detente que nos pueden cachar le digo riendo dándole un pequeño golpe en sus manos ya que me había abrazado por atrás y me estaba acariciando mi vientre moviendo sus manos hacia arriba.

Poncho: no puedo bebe ya sabes que cuando estas cerca de mí no me puedo contener me susurra al oído antes de ponerse a besar mi cuello dándole pequeños mordiscos. Sin evitarlo jadeo pegándome a él moviendo mi cabeza hacia un lado dándole mas acceso a mi cuello

Any: ya lo sé gatito, pero nuestra familia quedo en vernos aquí. Pueden llegar en cualquier momento le digo jadeando al sentir como sus manos me comenzaban acariciar los pechos y jugaba con mis pezones sobre mi bikini.

Poncho: sabes que solo nos hace unos minutos para hacernos tocar el cielo me susurra antes de mirar a todos lados por la playa asegurándose que nadie nos viera antes de arrastrarme detrás de una gran roca. Me pego a ella tomando mis manos en las suyas mientras las elevaba sobre mi cabeza haciéndome sonreír sobre sus labios.

Any: gatito sé que te gusta llevar el control y tomar tu tiempo, pero ahorita no lo tenemos le digo sonriendo mordiendo su labio inferior.

Poncho: si ya lo se nos vamos a tener que conformar por ahora...pero esta noche mantén tu puerta des laqueada eh. Planeo hacerte gemir mi nombre toda la noche me susurra sensualmente haciendo que las bragas de mi bikini se mojaran al instante haciendo que me frotara contra él. El me sonríe antes de acercarse a mi capturando mis labios con los suyos. Mis manos viajan por su pecho acariciándolo disfrutando sintiendo su abdomen bien marcado, su pecho bien definido y sonrió sobre sus labios cuando siento sus músculos tensarse bajo mis manos. Sigo bajando la mano hasta ponerla encima de su erección frotando y apretándola por encima de su bañador mientras el descansaba su cara en mi hombro gimiendo teniendo cuidado de no dejarme ninguna marca. Siento como sus manos viajan toda mi espalda hasta desatarme la parte superior de mi bikini antes de comenzar acariciarlos y pellizcando mis pezones haciendo que gimiera más fuerte, aunque me reprimo rápidamente ya que me acuerdo que estábamos en una playa publica y si hacíamos demasiado ruido alguien nos descubriría. Estaba a punto de bajarle su bañador cuando escuchamos que alguien grita nuestro nombre buscándonos.

Poncho: maldita sea! Tenían que venir justo ahora gruñe frustrado y yo solo pude soltar una risita alejándome de el para volver a ponerme la parte de arriba de mi bikini sabiendo que el observaba cada movimiento que hacía. Cuando termino me acerco para darle un último beso, aunque me retiene contra su pecho viéndome fijamente y me sonríe como tanto me encantaba