Donde Fuego Hubo...

Capitulo 50

POV Any

Any: no te han dicho que es de muy mala educación estar escuchando conversaciones ajenas? Además que estas haciendo aquí? Le pregunto alzando una ceja. El no quita su mirada seria, pero noto que le estaba costando no darme una sonrisa.

Poncho: no es ajena si la estas teniendo en un área publica y además lo que le molesta a mi princesa también me molesta a mí me dice con un brillo de diversión en sus ojos. La princesa al reconocer la voz de su papa se puso como loquita pateando sin parar buscando su contacto.

Poncho parece percatarlo porque veo como se le enternece la mirada y hace camino directo a mi vientre. La princesa al sentir la mano de Poncho se relaja un poco hasta que Poncho comienza a hacerla enojar cada que quitaba su mano de mi vientre. La princesa se revoloteaba como loquita cada que dejaba de sentir las caricias de Poncho y eso solo me hacia reír y sentir una infinita ternura. Todavía ni nacía y ya era toda una niña de papa y obviamente tenía a su papa en su manita mucho antes de nacer. Sabía que pasara lo que pasara entre Poncho y yo nuestra hija siempre seria amada y un punto de unión para los dos.

Any: no le hagas eso a la niña sabes que le molesta le digo dándole un pequeño golpe en su mano. Aparte no es área publica es mi casa y estaba hablando con mi hija le digo rodando los ojos.

Poncho: bueno está bien, pero de igual manera a ninguno de los dos nos gustó lo que dijiste. De dónde sacas esa idea de darle otro papa a nuestra hija cuando su papa está muy presente? Me dice Poncho serio nuevamente.

Any: Si bueno ya sé que ella tiene su papa, pero su mama necesita alguien con quien estar le digo deliberadamente queriendo ver su reacción. Por un segundo él estaba completamente en silencio y al segundo hubo un brillo malicioso en su mirada

Poncho: bueno eso también puede ser resuelto rápidamente por el papa de nuestra bebita me dice acercándose más a mí y me deja atrapada contra el sofá así que no hubo mucho que pude hacer más que quedármele viendo.

Any: el papa de mi pequeña sigue en una relación hasta donde yo sé, aunque solo sea en papel le digo viéndolo fijamente. Veo como él se me queda viendo fijamente un segundo y después me regala una de sus sonrisas maravillosas.

Poncho: precisamente a eso venia...te tengo una buena noticia por fin o bueno espero que sea una buena noticia para ti me dice algo inseguro. Pasa su mano por su cuello en más de una ocasión y puedo ver como estaba tratando de buscar las palabras indicadas para decirme lo que sea que tenía pensado decirme.

Poncho: bueno para comenzar quiero darte la razón. Todas esas veces que dijiste que tu hermana era una mentirosa manipuladora tenías razón. La encontré con su amante y estaban discutiendo sobe el hijo que iban a tener juntos. Aproveche la oportunidad y le pedí el divorcio me dice y por primera vez en mucho tiempo me quede sin palabras.

Any: es...es en serio? Vas a divorciarte...digo divorciarte definitivamente le pregunto incrédula ya que no creía que este momento llegaría y mucho menos que fuera algo que estuviera al alcance. Veo como sonríe grande y toma mi cara entre sus manos. Me quedo viendo profundamente a sus ojos que me veían fijamente a su vez.

Poncho: sé que es un poco difícil de creer, pero si es verdad. Por fin me desharé de mi matrimonio mi amor y si lo permites por fin vamos a poder estar juntos sin problemas, ni que nadie más se interponga en nuestra felicidad me dice sonriendo grande y sin percatarme comienzo a soltar unas cuantas lagrimas mientras me comenzaba a reír algo histéricamente a su vez. No podía creer que todos mis sueños estuvieran a mi alcance.

Any: es que enserio no me lo creo. Y dónde te estas quedando? Cuándo estará el divorcio? Le pregunto cautelosamente.

Poncho: ya pronto solo es cosa que me lo firme yya tengo pruebas por si no quiere proporcionármelo voluntariamente. Esta vez esmuy enserio mi amor. Pronto seremos libres me dice acercando sus labios más a míy no pongo resistencia cuando siento sus suaves labios presionados firmementecontra los míos. Sentía que estaba en un mundo paralelo en el cual todo lo que había sonado estaba a mi alcance. Lo amaba y ahora que sabía que podíamos estar juntos sin que nadie se interpusiera en nuestro camino no podía dejarlo. Mientras fuera real lo del divorcio me arriesgaría a estar con él. Me abrazo a él y hago el beso más profundo esperando trasmitirle todo lo que lo había extrañado. De momento solo podía esperar a que todo fuera tomando su curso y que la gente que más amaba aceptara esta decisión. Me separo de él y lo miro tiernamente acariciando su mejilla.