Capitulo 23

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POV Poncho

Poncho: perdóname sabes que a veces soy un imbécil que no sabe lo que hace ni dice. Aunque pensándolo bien siempre ha sido así cuando se trata de ti le digo sinceramente. Al principio mientras le estaba diciendo lo que me había dicho Diana no me había detenido a pensar en cómo eso le iba afectar. La verdad es que todavía ni siquiera definíamos lo que sea que estaba pasando entre nosotros para que encima le diga que me tiene que ayudar a organizar mi boda con nada más y nada menos que su propia hermana.

Any: ya no importa...se supone que para eso vine y si no lo hago mi papa me terminara obligando hacerlo de todas maneras me dice casi derrotada y siento como mi instinto protector vuelve hacer acto de presencia. La abrazo más a mi básicamente dejándola encima de mi regazo y le acaricio el cabello suavemente

Poncho: ¿no crees que deberíamos hablar de esto primero? ¿Digo definir lo que sea que tenemos tu y yo antes de seguir con los preparativos de la boda? Le pregunto algo desconcertado de que ella ni siquiera haiga mencionado el hecho de que yo tengo que cancelar la boda si quería estar con ella.

Any: no...no creo que sea necesario nosotros nos limitaremos a ser amantes de ocasión nada más. Ya tengo suficiente con que por una razón mi papa no me quiera como para que encima me termine odiando por ser la causante de que su hija dorada no se case me dice y yo siento como se me oprime el pecho al escuchar sus palabras.

Poncho: bueno si eso es lo que quieres está bien supongo. Aunque no sé si me gusta eso "de ocasión" saber que si fuera por mi estaría pegado a ti las 24 horas del día le digo sonriendo dándole un pequeño beso en los labios y veo como ella me sonríe recostándose por fin contra mi pecho escondiendo su cara en mi cuello

Any: si yo pudiera también estaría así siempre, pero tú no eres mío y vamos a tener que conformamos con lo poco que podamos tener me dice. Estaba a punto de replicar cuando escuchamos un ruido muy fuerte de afuera. Pronto vemos como todo se oscurece un poco y vamos a ver qué había pasado. Nada más viendo por la ventana vemos solo blanco y asumo que era pura nieve.

Poncho: supongo que es verdad eso de las avalanchas le digo medio divertido, aunque si preocupado porque nunca me había tenido que afrontar a una situación como esta.

Any: me lo habían advertido, pero creía que estaban exagerando me dice sumamente impresionada con la situación.

Poncho: viéndolo por el lado bueno estamos solitos y des comunicados hasta que alguien venga a rescatarnos le digo sonriendo coqueto tomándola de la cintura atrayéndola a mí. Siento como se ríe sobre mis labios y se pega completamente a mi

Any: no puedo creer que nuestra vida pueda estar en peligro y tu solo pienses en el sexo me recrimina divertida y yo me rio encogiéndome de hombros.

Poncho: no tengo ninguna defensa solo puedo decir que si es que morimos seré el más feliz si muero estando dentro de ti le susurró al oído y siento como se estremece en mis brazos.

POV Any

Después de haber aclarado todo y la pequeña avalancha Poncho me toma en brazos. No puedo evitar estremecerme en sus brazos cuando me dice que sería feliz de morir dentro de mí.

Any: enserio que estás loco Poncho...primero...primero deberías revisar que al menos tengamos leña para tener algo de calor le susurro tratando de mantener la poca cordura que me quedaba.

Poncho: no te preocupes mi amor yo sé cómo hacerte entrar en calor sin necesidad de leña me dice coquetamente mientras siento como su mano va viajando por todo mi costado hasta llegar a mi nalga donde me la aprieta suavemente atrayéndome más hacia su erección más que notable.

Any: Dios Poncho le digo jadeando. Cuando siento como me frota contra el siento como toda mi cordura sale por la ventana en un instante. Me acerco a él pegando mi boca a la suya besándolo apasionadamente. Decidí que todo lo demás podía esperar ahorita lo único que quería era sentirlo lo más dentro de mi posible haciéndome gemir y gritar de placer como solo él sabía hacer. Suelto un gritito de sorpresa cuando me toma en brazos para después subir de dos en dos los escalones de la escalera en busca de nuestro dormitorio. Llegando iba acercarme a él para desvestirlo, pero él se me adelante y me ata las manos con una de sus corbatas en un abrir y cerrar de ojos antes de verme coquetamente

Poncho: nada de tocar. Esta noche será toda para ti me dice sonriendo esa sonrisa de medio lado que siempre me había hecho derretirme. Yo solo pude asentir ya que no podía hablar de la anticipación. Veo como él se acerca a mi antes de besarme más tiernamente casi jugando conmigo mientras exploraba mi cuerpo por encima de mi ropa, aunque tomaba mucho cuidado en no tocarme dónde es que más lo necesitaba. Yo gemía desesperada tratando de moverme hacia sus manos ya que no me había dado permiso para hablar. El levanta la mirada y me mira divertido. Me acuesta en la cama y me quita mi pantalón antes de comenzar a besar mis piernas hiendo hacia arriba. Justo cuando siento que me iba a dar atención donde más la requería el muy carbón me sonríe travieso y me quita la camisa antes de volver atarme las manos juntas. Me sigue besando por el cuello justo en mi punto débil. Gimo removiéndome contra el buscando cualquier contacto que pudiera aliviar mi palpitante dolor que estaba centrado justamente en el centro de mi cuerpo. Sigue bajando sus besos y un movimiento experto me desabrocha el sostén de un solo movimiento antes de tomar mis pechos en sus manos acariciándolos evitando justamente mis pezones que estaban exigiendo su atención.

Poncho: calmada nena prometo que te daré todo lo que quieres y mucho más me promete sensualmente y siento como mojo mis bragas un poco más al ver su mirada devoradora sobre mí.

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