POV Any
Me desata las manos un momento antes de tomarlas y hace que las suba hasta el respaldo de la cama. Allí me la ata de nuevo antes de levantarse y salir de la habitación. Estaba a punto de gritarle que no me dejara así cuando escucho que estaba abajo en la cocina. Pronto regresa con un vasito lleno de cubitos de hielo y yo lo miro alzando una ceja. El solo me mira divertido desde el otro lado de la habitación y podía ver y sentir su mirada sobre todo mi cuerpo. Deja el vaso a un lado de la cama y veo embobada como comienza a desvestirse. Me regala una sonrisa coqueta al ver que le estaba toda mi atención y sigue desvistiéndose hasta que termina completamente desnudo. Veo que va hasta uno de los cajones y saca una venda. Le hago unos pucheros cuando veo que me iba a cubrir los ojos, pero al final solo me da un beso haciendo que me olvidara de todo mientras me vendaba los ojos. Siento como alcanza el vaso con los hielos, pero aun así suelto un gemido cuando siento el cubito de hielo hacer contacto con mi piel ardiente. Pronto siento como las gotas de agua van resbalando por mi pecho hacia más abajo mientras siento como él va moviendo el cubito de hielo en la misma dirección hasta que siento que está completamente derretido. Rápidamente siento la lengua de Poncho trazar la misma línea en la que había llevado el cubito lamiendo toda el agua que había dejado a su paso. No pude evitar arquear mi cuerpo hacia él y volver a gemir más fuerte cuando siento que toma otro cubito de hielo y lo pasa por todo mi pecho y pezones antes de repetir la acción de lamer toda el agua que había dejado a su paso el hielo. Trato de mover mis manos para pegarlo más a mí y que no se alejara, pero no pude ya que estaban atadas y solo me quedo gemir de frustración.
Poncho: relájate mi amor. Esto apenas está comenzando me susurra al oído y causa que un escalofrió recorra todo mi cuerpo. Repite la acción varias veces hasta que siento mis pezones duros como piedritas y seguro ya estaban completamente rojas por la excitación. Yo estaba más que lista para gritar de la frustración ya que todo mi cuerpo seguía en tensión donde solo estaba prolongando mi orgasmo. Le iba a pedir que terminara con esta tortura cuando siento que me baja mis bragas. No podía ver lo que estaba sintiendo así que solté un grito cuando no solo siento el hielo haciendo contacto con mi coño si no que también pude sentir sus labios sobre mi clítoris mandando señales mixtas haciendo que quedara mareada y deseosa por que continuara. El cubo de hielo no tardo en derretirse y fue remplazado por la lengua de Poncho. Yo jalaba en mis manos y arqueaba mi cuerpo hacia el cerrando un poco mis piernas para mantenerlo justo allí. Su lengua hacia maravillas y parecía que podía leerme el pensamiento ya que estaba haciendo todo lo que necesitaba y hasta más. De pronto se detiene y yo gimoteo retorciéndome en la cama frustrada al no poder alcanzar el orgasmo que tanto deseaba. Escucho como se desgarra la envoltura del condón y mi cuerpo se tensa en expectativa. Yo estaba más que lista para que me penetrara, pero en cambio siento como sus dedos comienzan a jugar con mi clítoris frotándolo fuerte y rápido llevándome muy rápidamente al borde del orgasmo una vez más. Quita sus manos y abro la boca para protestar, pero termino soltando un grito al sentir que me penetra hasta el fondo enviándome por fin al orgasmo de la manera más maravillosa. Él no se mueve ni un poco mientras yo me dejo llevar por mi orgasmo. Cuando todo pasa y quedo flácida en la cama siento como el comienza a moverse dentro de mí. Mi cuerpo vibra y siento escalofríos por todos lados sin saber si mi cuerpo podía aguantar otro orgasmo en tan poco tiempo. Pronto Poncho me tenía debajo de él gimiendo y aferrándome a la corbata con la que tenía atadas de las manos moviendo mis caderas contra las suyas buscando un contacto más profundo. Sentía como se aferraba a mis caderas y seguro después de esto terminaría con al menos un moretón, pero en este momento ese era lo último en lo que estaba pensando. Un par de embustidas más siento como mi cuerpo se tensa y como lo va exprimiendo cada vez más hasta que otra vez llego a mi orgasmo. Vagamente escucho como gime fuerte y se aferra mas a mí. Siento su peso encima de mí, aunque no podía quejarme ya que era la sensación mas extraordinaria que podía sentir en estos momentos. Podía sentir su respiración agitada cerca de mi oído y sentir el sudor de su pecho contra el mío. Su corazón latía al mismo ritmo desenfrenado que el mío y yo no podía estar más feliz. Después de unos minutos ya no siento tanto el peso de su cuerpo encima del mío. Me destapa los ojos y veo su mirada sonriente y divertida a la vez antes de que me volviera a besar mientras me desataba las manos.
Poncho: bueno ya que no morimos vamos a ver qué podemos hacer sobre nuestra situación me dice riendo. Yo niego rodando los ojos y cuando se levanta le doy una nalgada divertida
Any: vamos a ver qué es lo que puede hacer señor macho para sacarnos de esta le digo divertida mientras me levanto a cambiarme ya que se comenzaba a sentirse el frio.
Poncho: oh nena sabes que puedo hacer muchas cosas...pero esas luego te las demostrare me dice sensualmente guiñándome un ojo haciendo que mi cuerpo entero se estremeciera. En cuanto termino de vestirme me quedo viendo hasta que el también termina y después bajamos juntos para ver que podíamos hacer sobre nuestra situación.
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Donde Fuego Hubo...
FanfictionAnahí odia a su futuro cuñado que parecía dispuesto hacerle la vida imposible. Entre ellos los une y separa un pasado que nadie más que ellos dos saben. Ahora su hermana gemela, Diana, la engaño para ir a Canadá para ver una locación de su futura bo...