Capítulo 5: ¿Acaso...?

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—¿Y el rojo?

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—¿Y el rojo?

—Prefiero el verde.

—¿El sombrero verde?

—Tal vez —respondo confundido, Vee guarda su sobrero rojo en su closet y pone sobre su cabeza el que he señalado, aun que cuando se lo veo puesto no estoy completamente seguro si fue buena idea aquel color —creo que ese tampoco.

—Mejor sin sombrero.

—No entiendo el objetivo del sobrero ¿Tan especial es la cena del día de hoy? —Vee se me queda viendo y rodea su mirada, ella me informa que hoy a la noche vendrán unos accionistas amigos de su Padre y necesitan que todo esté en orden, una buena cena con una buena charla abre la oportunidad de la coordinación de un nuevo negocio que podría ser muy bueno para las finanzas familiares —¿Así lo piensas tú?

—En realidad mi Padre lo dice así, te repetí justo sus palabras —dice ella riendo.

—¡Hunter! ¿Puedes venir a ayudarme un poco?

—La cocinera me llama —le digo a Vee fingiendo estar angustiado.

—Ve —dice ella con una sonrisa, yo bajo las escaleras rápidamente para luego caminar hacia el lugar de donde me llamaban.

—Hunter ¿Puedes por favor quedarte cuidando los huevos que están en la olla? Necesito que apenas hiervan los apagues y los dejes en agua helada.

—Claro, no hay problema.

—¡Gracias! Me he olvidado del vino y debo ir a la bodega por uno de los buenos.

—Vaya tranquila y no corra que aún hay tiempo —La cocinera asiente riendo y sale huyendo del lugar, veo que tiene bastantes cosas sucias sobre la mesa; las tomo y las lanzo sobre el lavaplatos para tratar de que este lugar se vea menos desastroso.

Mientras lavo las cosas, escucho que la puerta de entrada de la casa de los Beili se cierre y dos chicos riendo vienen, sé perfectamente quiénes son y espero que ninguno de los dos se cruce en mi camino.

—Voy por mis botines negros y salgo —grita Jyaden, no escucho lo que dice el otro chico, solo sé que siento pasos acercarse y veo como Charlie se pone de pie a un lado de la puerta de la cocina, se me queda viendo y no habla.

—¿Necesitas algo?

—¿Puedes prepararme un café? No mejor un jugo de naranja, no sabes eso me haría un poco mal para el estomago ¿Crees poder prepararme un café helado? Pero tiene que ser rápido ya que estoy por salir con Jyaden.

—En realidad no preparo esas cosas —digo levantándome de hombros —La cocinera ha salido y estoy solo cuidando algo aquí.

—Pero quiero un café helado —dice él enfadado —Hazlo.

—No puedo —digo gentilmente —Están usando las cosas de la cocina para la cena de hoy en la noche y no hay más espacio para preparar nada, lo siento —digo tragándome la molestia que me provoca su forma de actuar.

Debo SalvarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora