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Piscis.

En la vida de un ser humano, la infancia es una de las etapas más importantes y me atrevería a decir que la única con semejante peso, ya que, según los pediátras y psicológos es donde nos educan para poder ser buenas personas en lo que sigue de nuestras miserables vidas.

De niño no tuve ese cuidado y educación que se necesita para llegar a ser aquella persona ejemplar.

En una casa donde la violencia era el ingrediente principal, no se puede pedir algo llamado "amor". Muchos niños lo experimentan hasta de modos excesivos pero yo no tuve ni una pisca de aquello.

Esos niños cuando se levantan, van a la cocina y los reciben con un buen desayuno, así que, un día me levante para poder preparar algo de desayuno para aquellos padres que me amaban, o bueno, al menos mi madre. En lugar de eso, terminé llorando sobre el cuerpo sin vida de mi propia madre.

Luego de eso, el orfanato se volvió mi nuevo hogar. Con un padre en prisión por el crimen de su esposa y una madre difunta era un poco obvio mi paradero.

Hasta que dos años después de tanta espera llegó mi nueva oportunidad de ser feliz. Cuando me mudé con mis padres adoptivos la calidez de sus corazones era tan inmensa que decidí quedarme allí por siempre.

Ellos me dieron: cuidado, cariño, educación, techo, comida y lo más importante AMOR.

Era como un mundo paralelo donde siempre tuve que estar. Y desde ahí empecé a creer en los mundos paralelos y que hay alguien quienes controlan nuestras emociones y acciones.

Es un poco loco pero el niño de 12 años amaba aquella idea. Y aún la sigue amando.

Mucho tiempo después puedo decir que extraño a mi madre, una persona luchadora y valiente, mientras que a mi padre me gustaría que lo tragué un hoyo negro donde nunca vuelva hacerle daño a nadie.

Lo siento, mami, si no pude salvarte.

Tauro.

Las cosas están mas tensas que nunca, y la verdad que hay motivos. La desaparición de Cáncer dejo dudas y sospechas que no pueden ser respondidas por nadie.

- ¡Tauro!

Veo a Sagitario corriendo mientras no para de gritar mi nombre desesperado. Y cuando levantá la mano puedo divosar lo que tiene en ella.

El estómago prácticamente está en mi faringe pero no dudo en correr hacia él.

En un rápido movimiento envuelvo mis piernas en sus caderas y lo besó con toda la emoción del mundo.

Sus labios son tan suaves que, maldición, quiero morir en ellos.

La falta de aire nos hace separarnos. - ¡Diablos Sagitario! ¡La tienes!

Su sonrisa es la más hermosa del mundo. Ilumina todo este estúpido lugar.

Asiente efusivamente pero en segundos vuelvo a besarlo eufórica.

¡Tiene la maldita llave!

Al llegar con los demás algunos no despegaban la mirada de nuestras manos entrelazadas pero al recibir la noticia la despegaron rápidamente para ver la llave.

¿Esto significa que podremos salir de aquí pronto?

- ¡Mierda! ¡Me estoy hiper ventilando de la emoción! - dijo Capricornio mientras movía rápidamente sus manos frente a su rostro.

Virgo agarró la llave y sonrió.

- Solo nos falta encontrar dos y adivinar que puerta abre.

Y aquella noche o día, ya que no tenemos noción del tiempo, en una ronda charlamos entre risas como si nos conocieramos de toda la vida.

Puedo decir que esto nos marcará de por vida.

cuarentena [zodiaco] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora