Aprendiendo a amar 🌼 || WARIAM

🌼 6.

Nuestras caras por la mañana, son un poema.

En el comedor me choco contra Agoney mientras voy con mi bandeja en busca de la comida, porque no sé ni por dónde ando. Nos miramos y nos echamos a reír.

Doy gracias si hemos dormido cuatro horas. Yo las he dormido seguro porque me marché antes, pero creo que el resto habrá dormido unas tres. Pueden ser suficientes para alguien, pero no cuando tienes clase con Magali a primera hora y una infinidad de actividades durante el día. Me alegro de haberme escaqueado de la carrera matutina por el tema de la rodilla, porque así me ha dado tiempo a ducharme, vestirme, y esperar a que los chicos volviesen de la carrera por el bosque para ir todos al comedor a desayunar.

-¿Cómo está tu rodilla? -pregunta el canario.

-Bueno, pensé que estaría peor. La verdad es que voy bastante empastillada, pero puedo caminar sin muletas -él se encoge de hombros y niega con la cabeza.

-Quizás eso de beber y bailar te ha recompuesto la rodilla en vez de acabártela de joder.

Me echo a reír mientras pongo dos tostadas en mi plato y busco el aceite a mi alrededor.

-Desapareciste de repente, ayer -apunta Agoney. Casi se me resbala el aceite que acabo de agarrar.

-Ya, es que me cansé. Que ahora esté bien de la rodilla no significa que ayer estuviese perfecta, tampoco -respondo, mientras hago el amago de irme de allí.

Agoney me bloquea el paso.

-Te vi, Ana. No te cansaste -¿de qué va ésto?

-¿Qué dices Agoney? -sonrío falsamente. -Me cansé y me fui.

-Miriam te dijo algo que te enfadó, estaba a vuestro lado, ¿recuerdas?

Claro que lo recuerdo. Su amiguita rubia de pelo rizado me hizo sentir ridícula, una vez más.

-No lo recuerdo.

-Ya -dice Agoney, echándome una mirada que básicamente dice "no te lo crees ni tú".

Llego a mi mesa en el momento en el que Noe entra en el comedor. Nos saluda brevemente, y al pasar por el lado de Amaia, retrocede un paso y mira nuestro grupito. Amaia tiene una cara totalmente inexpresiva, Aitana ni siquiera se ha planchado el flequillo, Alfred está pálido, y Roi tiene problemas para terminarse la magdalena que tiene en el plato.

-Parece que alguien no ha dormido ésta noche -nos recrimina. Luego se gira hacia la mesa donde Miriam y su grupo desayuna. -Bueno, de hecho, parece que más de un "alguien" no ha dormido ésta noche.

Nerea se está durmiendo prácticamente encima de su bol de cereales, Agoney acaba de sentarse dejando escapar un largo suspiro, Raoul apoya su cabeza contra la mesa, Miriam tiene las ojeras más marcadas que he visto nunca, y aun así me parece preciosa; y Mireya, bueno, Mireya está fresca como una rosa, y saluda a Noe con una sonrisa.

-Luego hablaremos -dice la directora, antes de atravesar el comedor para ir a coger su propio desayuno.

🌼🌼🌼

Es mundialmente conocido que, los mejores remedios para la resaca son: beber agua, dormir, y bañarse en una piscina. Aquí no tenemos piscina, pero tenemos un lago estupendo apto para eso. Así que una vez damos por terminadas las clases del día, me pongo mi bikini azul claro, las chanclas, y la toalla: Roi y yo nos vamos al lago.

Aitana y Amaia se quedan durmiendo en las literas, y Miriam no aparece por la cabaña, así que supongo que está en la habitación de Mireya y Nerea.