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Despertó sintiéndose descansada por primera vez en dos meses, se sentía bien, relajada, como una pluma. Por primera vez en mucho tiempo se levanto ella sola de la cama, sin la necesidad de obligarse o auto convencerse de que debía hacerlo simplemente lo hizo. Aun era de día, calculo que las diez de la mañana, no quiso ni mirar el reloj. Se metió en la ducha y se relajo, primera vez en mucho tiempo que podía respirar sin un nudo en el estomago.


Bajó a desayunar sintiéndose como nueva, había considerado la posibilidad de salir a correr pero la idea se le borro de la cabeza inmediatamente, se sentía bien pero tan poco era para tanto.


Se encontraba a media tostada en su bella mañana cuando unos golpes en su puerta la sacaron de su estado mas zen.  Respiro tranquila, no iba a permitir que nada ni nadie le arruinara aquella calma que hacia meses que no tenia. Se acercaba a la puerta sin saber que aquella decisión le iba a pasar factura por lo que parecería una eternidad.


Abrió la puerta encontrándose cara a cara con Louis quien sin siquiera preguntar ni dar los buenos días se adentro su casa como si fuera la suya propia.

-Buenos días Alex, que tal has dormido? Bien, gracias Louis. Y tu?

Siguió los pasos del castaño hacia su cocina y lo miro con los brazos cruzaos y las cejas alzadas esperando un saludo o una explicación.

-No tengo tiempo, vístete.- Suspiró.-Nos vamos.

-¿A donde?-Frunció el ceño y recapacitó.- No, no.-Negó con la cabeza antes de suspirar y retomar la calma.-¿Sabes? no contestes por que no pienso dejar que me estropees este bonito día.

-Tranquila, gatita, vengo a arreglártelo.-Se aproximo a ella con cada palabra y acaricio su mejilla antes de susurrar:- Vístete

-Estoy vestida.-Alzo los brazos y frunció el ceño como si fuese obvio.

-Parece que vas en pijama.

Soltó una carcajada exagerada y sonrió con falsedad. Miro a Louis de arriba abajo y lo señalo.

-Se llama chándal, creía que los conocías teniendo en cuenta que tu llevas uno!-Su voz se alzo al exclamar las ultimas palabras.

-No te alborotes, Peque.-Soltó una pequeña risita.- Vamos, puedes comerte esa tostada de camino.-Señalo la tostada y se encamino a la puerta.

Alex cogió su bolso y la tostada y salió por la puerta. No podía entender por que sus pies siempre se movían al son de los de Louis, no sabia por que hacia lo que el quería, o por que iba donde el la llevaba, ni siquiera tenia una razón para fiarse de el pero aun así lo hacia y sabia que aquello no traía nada bueno consigo, Louis no era nada bueno.

Ambos se subieron a la camioneta de Louis, era negra, bastante bonita, una camioneta con la que Alex había soñado muchas veces, pero una camioneta que jamás conseguiría pagar.

Louis encendió la radio y uno de sus CDs, el cual se encontraba ya dentro, comenzó a sonar.

"In the middle of the night, when the angels scream,

I don't want to live a lie that I believe.
Time to do or die.

I will never forget the moment, the moment.
I will never forget the moment.

And the story goes on... 
That's how the story goes..."

Louis cantaba junto a Jared Leto y Alex simplemente se dedicaba a escuchar mientras movía la cabeza al son de la música. El viaje duro una media hora, lo suficiente para unas cuantas canciones y para que Alex se terminara la tostada. La rubia no sabía donde estaban, Louis la había llevado a un barrio donde no había gran cosa, había unas cuantas casas pero estaban en ruinas y tampoco parecía tener muchos habitantes, era un barrio marginal pero Alex no entendía porque habían ido a parar ahí, aunque no hizo preguntas sabiendo que Louis jamás le contestaría.

Devilish Grin. (Harry Styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora