¿El amor existe?

CAPITULO 15- NOVIA

No sé cómo acercarme a ella, los nervios son bastante fuertes, no puedo quitármelos, desde la mañana no me he acercado a ella, mierda odio esto... tengo que armarme de valor e ir con ella...

Tocaron el timbre, es cambio de clase, nos toca química... mierda me toca sentarme junto a ella, ¿ahora que hare? Creo que saldré corriendo... no, no puedo salir, demonios, ¿Qué hago? ¿Qué carajos hago?... ni si quiera me di cuenta cuando me senté... Mierda, ya viene.... Actúa normal... tranquilízate... creo que es imposible.

Hola Pam... -me sonrió muy tierna

Ho... Hola Zefardy... -trate de no sonar tan nerviosa, rio por mi reacción

¿Cómo estas Novia?... -sonrió, no pude evitar sonreír como idiota.

Bie... -aclaré mi garganta- Bien, novia- en este momento sentí arder mis mejillas.

Me gusta cómo suena eso... -sonrió una vez mas

...- las palabras no salían de mi por más que quisiera.

¿Te sientes bien?... estas muy muy roja- rio levemente. Me cubrí rápidamente la cara con mis manos.

Lo... lo siento, es que tú me pones así- dije aun con las manos en mi rostro.

Que linda... pero, quítate las manos de la cara... -mientras lo decía puso sus manos encima de las mías para retirarlas de mi rostro, sentí una vez más la corriente eléctrica recorrer todo mi cuerpo.

Wow, nunca te había visto tan roja, te vez muy tierna así... -sonrió dulcemente y tomo mi mano.

Eres la única que me ha puesto así... nunca me había pasado, solo contigo... y es muy raro- me sonrió de una manera tan linda....

No hablamos por mucho tiempo, la clase ya había empezado, no podíamos hablar... cuando nuestras miradas se cruzaban o nos tocamos por accidente, las dos no podíamos evitar sonreír... debo aceptar que no me había sentido así con nadie, no me ponía tan nerviosa con una persona, no me pasaba esto... con ella todo es diferente, siento las típicas mariposas, mis mejillas arden cuando hablo con ella, creo que ella es la correcta, simplemente no quiero estar con nadie más... cuando termino la clase le dije que si le gustaría que la acompañara a su casa... se emocionó y me dijo que eso le encantaría... creo que es mi oportunidad de... ya saben, de besarla... solo espero que los malditos nervios no me traicionen...

Me tope a Kuri y le dije que no podría irme con ella... comprendió, me dio una sonrisa de complicidad y se despidió de mi...

Mi novia y yo nos dispusimos a caminar, íbamos hablando de cosas vanas... pero, no dejaban de ser interesantes, tan solo de hablar con ella.