—¡Aléjate! Sólo vete de aquí —gritaba y Scarlet no lo entendía.
—¿Ahora que te picó? ¿Eres bipolar? —preguntaba fastidiada de aquel comportamiento.
—No haces más que arruinar mi vida, ayer intenté ser amable contigo y en cambio recibo esto —no tenía por qué aguantar más tiempo en aquella clínica. Ya se había vestido y solo esperaba a su madre para irse de ahí.
—Ayer te salvé la vida imbécil. Dime en qué mundo salvar a alguien de la muerte es una estupidez, aunque ahora mismo veo las razones por las cuales dejar a su deriva a ciertas personas —ya molesta tomaba aquella bolsa de golosinas que llevaba con ella.
—Todos solo ven a una enana cargándome, arrastrándome. Soy el hazmerreír de todo Chicago por segunda vez y solo gracias a ti —volvía a gritar, estaba furioso y solo no quería verla, un minuto más y la ahorcaría.
—Entonces, déjame ver si entiendo. Lo mejor habría sido dejarte asfixiar por aquellos gases a los cuales eres alérgico, así tu muerte habría sido más heroica —hablaba fuerte, rápido y con mucho sarcasmo —ya me imagino los encabezados de los periódicos “Gigante de 3 metros muere por humo de helio y nitrógeno” En una hermosa velada, estudiantes celebraban tranquilos y con entusiasmo su próxima graduación, de pronto una espuma espesa y mucho humo comenzó a adornar el lugar, en donde resultó muerto un joven, quien alérgico comenzó a hincharse como un globo y que pese a su gran altura no pudo alzar la cabeza por sobre la nube que solo cubría la mitad de la altura del salón de fiestas —Liam la miraba con rabia de reojo y ella solo le devolvió la mirada —¡Oh sí! Aquello habrá sido mejor.
—Por tu culpa mi padre piensa desheredarme ¿Contenta con tu gran proeza? —escupía literalmente las palabras, tanto que Scarlett sentía leves gotas de saliva.
—¿Por qué habría de estar contenta? Ni que tu herencia la fuera a recibir yo.
—Solo ¡Lárgate!!!!!!!!
—¡Échate a perder inútil! —Gritó aún más duro —por cierto te quedarás con las ganas de besarme.
Solo dijo aquello para molestarlo y con postura prepotente salió de ahí. En la puerta se topó con Ian que llegaba, pero no le prestó atención. Liam con furia tomaba una de las almohadas e imaginando que era Scarlett la presionaba imaginándosela rogar por su vida.
—¡Ahg! ¿Por qué no se les pueden pegar a las chicas? —refunfuñaba viendo a Ian a su lado.
—Se les pueden pegar, pero no se debe hacerlo nunca. Ahora disculpa la intromisión pero… ¿pensabas besarla? —lo había acabado de escuchar y no lo creía.
—No, bueno… solo fue por lástima —respondía ya dejando la almohada a un lado.
—¿Lástima? —aquello era peor.
—Verás estaba tomado y la cosa esa es patética como nadie. Piensa en alguien patético y ello lo supera mil veces, dice tantas cosas que no sabes si reírte de ella o llorar a su lado. Me dio lástima saber que alguien pueda estar tan solo en la vida y tal vez…
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Envenenado de ti
Teen Fiction¿Qué tanto puede cambiar tu vida en un día? Elisa Lubensky una chica rebelde, que disfruta su vida al máximo sin importar lo que digan los demás de su apariencia y modales, se ve envuelta en una situación que cambiará su vida, sus sentimientos y acc...