Capítulo 14

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A pesar de las diferentes cosas que Harry podía hacer hasta el inicio del curso escolar pasó los dos días restantes mirando sus nuevos libros. El material de tercer año era igual de fascinante que el de los dos cursos anteriores y ya tenía ganas de comenzar... sobretodo la asignatura de runas antiguas, porque de lo que había visto, se le abría todo un mundo lleno de posibilidades para sus diferentes hechizos y pociones... se moría por comenzar.

Su horario escolar le fue entregado el día antes del comienzo de clases, aunque tampoco resultaba tan complicado de saber, tan solo debía preguntar a sus nuevos compañeros para las clases regulares. Así pues, el día que comenzaron las clases, fue fácil para él, el saber que debía hacer. La primera clase que tuvo fueron encantos y muy rápidamente demostró que igual que en cursos anteriores aquello era demasiado fácil para é, ya que dominó los hechizos que le enseñaban con increíble rapidez. Una rapidez de aprendizaje, que se demostró en todas las clases de ese día, incluida la de Runa antiguas, que tantas ganas tenía de comenzar.

A partir de ese momento, era fácil verlo junto con sus amigos en la biblioteca para estudiar (no debíamos olvidar que para el resto de estudiantes se le acercaban los exámenes finales) o investigar... después de todo, Harry se había dado cuenta que a pesar de lo bien equipada que estaba su biblioteca particular, parecía que con respecto a las runas que estaba estudiando en esos momentos, había más información en la biblioteca escolar... claro, que una vez que supiera las bases...

La asignatura de Cuidado de Criaturas Mágicas también estaba resultando ser magnífica... estaban estudiando los diricawls y a Harry le encantaban. Tal vez el que todas las criaturas y animales mágicos se sintieran cómodos en su presencia, tendría alguna cosa que ver, pero muy pronto, aquella se convirtió en una de sus clases favoritas; además, no dejaba de ser divertido ver como el resto de sus compañeros tenían disputas silenciosas por quien sería su compañero de proyecto durante la clase,... aunque, como era una clase compartida con gryffindor, siempre solían ser los gemelos quienes ganaban.

- El señor Potter es... impresionante.- Murmuró la profesora McGonagall aproximadamente tres semanas más tarde.- Creía que tal vez habríamos llegado a un punto donde tendría el mismo nivel de aprendizaje que el resto de sus compañeros de clase, pero es obvio que aún no hemos alcanzado ese punto. Me pregunto si seremos capaces de alcanzarlo.

- Yo también me lo pregunto...- Dijo el profesor Flitwick.- Parece que cuanto más exigimos de él, más fácil le resulta hacer lo que le pedimos. En mis clases aprende los hechizos de la clase regular más rápido que sus compañeros y casi ha avanzado el punto en el que estaba el resto de alumnos cuando el se incorporó a tercero... No sé si a los demás les sucede lo mismo en sus clases.

- Yo más bien me pregunto si llegaremos a poder suponerle un reto.- Murmuró el profesor Irons.- A veces creo que aunque lo pusiéramos en el último curso, no supondría un gran esfuerzo.

Albus Dumbledore observaba desde la mesa de profesores al mencionado alumno, mientras escuchaba a su personal hablando de él. El muchacho suponía ser todo un misterio, algo que él no podía prever, y aquello no le gustaba. Siempre había disfrutado de tener todo lo que le rodeaba en su control y ahora parecía que había un cable que estaba fuera de todos sus proyectos. Durante años, se había esforzado por asegurar que Brian estuviera bien cuidado y que confiara en él; de Harry no se había preocupado, porque después de todo no era importante, la profecía daba importancia a Brian... además, a medida que pasaban los años, James y Lily le habían asegurado que el muchacho era nada más que un squib... nada más cierto de la realidad... ¿Qué debía hacer? ¿Debía de tratar de ganar su confianza? Lo mejor sería ir vigilándolo y ver como se desarrollaba todo, después de todo, Brian era el Potter importante. Pero aún así, a pesar de saber que era su hermano quien un día demostraría ser fundamental para el mundo que los rodeaba, el mayor no dejaba de ser una variante impredecible, además por lo que sabía Brian no había mostrado ningún tipo de habilidad excepcional por el momento, claro que Harry tampoco antes de Hogwarts... sí, lo mejor sería esperar.

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