as long as we're together | flozmin

Capítulo 20: Imperdonable

Ya era tarde cuando llegó a casa y como de costumbre no había nadie, ninguna de sus hermanas con quien desahogarse, sólo Miru que dormía tranquila en su habitacion. Se sentó en el salón no podía dejar de pensar, se sentía furiosa con Jaz, ella había prometido estar siempre a su lado pase lo que pase y ahora? sólo le pedía un poco más de tiempo solo eso, no podía con su humor, fue al minibar y se sirvió una copa con dos dedos de Wisky, no tenía costumbre de beber pero sentía que necesitaba relajarse de algún modo...
De repente timbre

- Dios! Y ahora quién carajos es..- Se apresuró a abrir la puerta con cara de pocos amigos

- Mi amor.... - llegaba el con un ramo de rosas rojas

- Ah Fer..

- Como que ah Fer? Llevo llamándote hace un buen rato, me preocupe y veo que hice bien en venir por la cara que tenéss y el aliento a... Alcohol? Desde cuándo te ponés a beber sola? Contame por favor bebé - recordaba cuando se lo decía Jazmín y se sentía decepcionada - estoy para ayudarte en lo que necesites siempre, acordate que en la buenas y en las malas - pensó por un segundo en eso que acababa de decir y era cierto Fer jamás le había fallado, siempre estaba ahí para ella.
Fer la empezó a besar y a acariciar delicadamente, con mucho amor.

- Fe.. Fer pará... no...

- Vamos amor... Hace ya casi dos semanas desde que volví y no hemos estado juntos, casi ni me besás o acaricias, te extraño, realmente te extraño, te necesito, te amo, dejame demostrarte cuánto. - La empezó a besar cada vez de forma más intensa, ella no quería pensar, hacía días que lo estaba evitando, sentía que ya no podía evitarlo así que simplemente se dejó llevar por la amargura, la tristeza, la decepción que sentía, Fer la subió a su habitación y entre toda esa mezcla de sentimientos se entregó a él sin pensar, sólo sintiéndolo a él, a su forma tan dulce y delicada de amarla hasta cuándo estaban juntos en la intimidad.

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A la mañana siguiente se despertó sobresaltada para verlo a el tan tranquilo y en paz a su lado y comprobar que no, no había sido un sueño... Se había entregado a Fer. Las lágrimas empezaron a caer, su respiración se comenzó a agitar al darse cuenta de la estupidez que había hecho, había traicionado al único y verdadero amor de su vida y no existía justificación alguna para lo que acababa de hacer. Se levantó de la cama con cuidado, se puso lo primero que encontró, una camisa de Fer y bajó a la cocina, no podía controlar su respiración, su mano se hizo un puño y empezó a darse en el pecho, su Tourette se manifestaba con fuerza, se agarró como pudo de la mesada con fuerza y empezó a respirar profundamente hasta que se calmó lo suficiente para agarrar un vaso de agua, era sábado todos dormían y no quería despertar a nadie... Otra vez sonó el timbre, sintió una especie de dejavu, de como había empezado la peor decisión que pudo tomar en su vida...
Se dirigió rápidamente a la puerta sin darse cuenta que sólo llevaba puesta la camisa de Fer y una bombacha, cuando abrió la puerta sus ojos se abrieron como platos, se puso pálida y se quedó parada, era ella, era Jazmín... La colorada entró un poco acelerada sin casi verla, dejando a Flor sin saber que decir o hacer.

- Flor! Amor perdoname que venga así un finde tan temprano pero no aguantaba más, fui una boluda y... - Se dió la vuelta para verla mejor y se quedó muda al verla con una camisa que no era suya, de repente por las escaleras baja Fer solo con un pantalón de pijamas.

- Flor? - la llamó - Flor bebé - sin percatarse de que había alguien más - Flor gracias por hacerme el hombre más feliz de este mundo, no sabés cuánto te extrañaba asi, te am...

No pudo terminar de hablar cuando vió a aquellas mujeres mirándose fijamente inmóviles sin hacer o decir nada... unas lágrimas empezaron a asomarse por los ojos esmeralda de Jazmín que a toda costa intentaba apretar las manos y no largarse a llorar.