as long as we're together | flozmin

Capítulo 29: Un solo corazón

Flor se despertó alrededor de las 8pm. Por un momento se asustó al ver que no estaba en su casa, o en su cama, pero entonces recordó todo lo que había sucedido en las últimas horas. Y se puso más nerviosa todavía. Estaba en la casa de Jazmín, en la cama de Jazmín, pero sin Jazmín. Se levantó con cuidado y salió del cuarto. Las luces estaban apagadas, no tuvo tiempo ni de preocuparse cuando escuchó las llaves abriendo la puerta. Jazmín entraba con dos bolsos, con cuidado, como tratando de no hacer ruido por si Flor todavía dormía.

- Hola. - dijo Flor.

- Ayy - suspiró Jazmín.

- Ay perdón, no te quería asustar. - se disculpó.

- No, tranquila, es que pensé que estabas durmiendo...fui a comprar algo para comer porque no tenía nada en casa. - dijo tranquila, yendo para la cocina y dejando los bolsos sobre la mesa.

- No hacía falta igual, no quiero molestarte.

- Sí hacía falta, tenés que comer, y yo también - se río por primera vez desde que Flor había llegado, eso le calentó un poco el corazón a la morocha - cómo estás?

- Estoy mucho mejor, muchas gracias Jaz y...perdón.

- No me pidas perdón, es que...me asusté mucho...no sabía qué te pasaba y...y tuve mucho miedo... - de repente se le quebró la voz y agachó la mirada.

Flor al darse cuenta de eso, se acercó a ella y le agarró las manos.

- Ey, yo estoy bien, estoy acá.

- Estás acá. - dijo mirandola a los ojos.

- Sí, y no me muevo de acá. - le devolvió la mirada con una pequeña sonrisa.

Jazmín le regaló una sonrisa llena de tristeza y se alejó.

- Qué querés comer? Compré un poco de todo.

- Lo que vos quieras.

Jazmín la miró y volvió a sonreír. La había extrañado mucho. Cómo había siquiera pensado que iba a poder olvidarse de ella? Ahora le parecía lo más imposible del mundo.

Cenaron casi en total silencio, sin contar unas miraditas de vez en cuando, y después fueron al living.

- Segura que estás bien? No querés nada? Te hago un teci...

- Jaz. - la interrumpió, se dió cuenta de que estaba nerviosa, era entendible. Ella también lo estaba. - estoy bien, de verdad, vení, sentate acá conmigo.

Jazmín lo dudó por unos segundos, (segundos que a Flor le parecieron meses) y después se sentó al lado de Flor, muy cerca, por cierto.

- Me vas a contar? - empezó Jazmín.

- Qué?

- Qué te pasó ayer? Nunca te había visto así. Y de verdad...yo...ay Dios...Flor, yo no quiero hacerte sentir así, no quiero que estés mal por mi culp...

- Pará pará - la interrumpió Flor, sientiéndose ahora más culpable que nunca. - Jazmín, vos no me haces mal, es más, sos la unica persona que me hace bien en el mundo.

Jazmín guardó silencio, con lagrimas en los ojos.

- Yo...tengo Tourette. - Jazmín no reaccionó, esperando a que Flor siguiera. - Hacía muchos años que no tenía tantos tics y estos ataques, pero supongo que...pasa... - Jazmín todavía la miraba sin decir nada, y Flor estaba por desesperarse, hasta que Jazmín habló.

- Yo...no sabía...por qué nunca me lo dijiste Flor?

- No sé...capaz porque me daba vergüenza...

- Flor - le dijo Jazmín cómo retandola, después se acercó y le agarró la carita con las manos. - Vos sos perfecta, no tenés que tener vegüenza por ser como sos. Sos hermosa, me escuchaste? Y no quiero que pienses más estas cosas, no quiero verte mal, porque me hace mal a mí también.

A este punto las dos estaban llorando. Flor se tiró a los brazos de Jazmín, y ésta la envolvió en un abrazo lleno de amor. Flor se sentía protegida en los brazos de su amor. Amaba senir esa protección con Jazmín.

- Pero... - Jazmín se separó lentamente para mirarla - fuiste al médico? Esto no te puede hacer mal? Digo...ahora que...

Y en ese momento algo se iluminó en la cabecita de Flor. Jazmín todavía pensaba que ella estaba embarazada! Dios, hacía horas que estaba con ella y recién ahora se acuerda de lo más importante.

- Ay Jaz...

- Qué pasa?

- Jazmín, yo no estoy esperando ningún bebé...

- Qué? - sus ojos se abrieron -  Pero...pero si...Helena me dij...

- Si ya sé, pero entendiste cualquiera...o bueno, ella te explicó cualquiera. Sólo tenía un atraso, y era por el estrés de...estos ultimos días...

- Dios - Jazmín se levantó, y Flor con ella - No entiendo nada...

- Jaz. No estoy embarazada. Y no quiero estarlo. Por lo menos no de una persona que no amo.

- No estás embarazada. - decía una Jazmín que todavía no entendía nada de lo que estaba pasando.

- Exacto.

- Flor, yo me vine para acá porque no quería ser más un obsaculo entre vos y Fernando, y más cuando pensaba que estabas emba....

- Jazmín, no sos ningún obstaculo. Vos sos lo más importante de mi vida. Y quiero estar con vos. Y quiero que me perdones, porque te juro que jo se cómo demostrarte lo arrepentida que estoy.

- Viniste a Italia.

- Eh?

- Viniste hasta acá para decirme que no estabas embarazada? - no pudo ocultar una sonrisa que amenazaba con formarse en su rostro.

- Bueno...es que no me contestabas los llamados, entonces yo...

Y Flor no pudo terminar la frase. Porque los labios de Jazmín sobre los suyos se lo impedían. Jazmín la estaba besando. No estana soñando, era real. Jazmín la estaba besando después de todo ese tiempo.
Con una mano enredada en su pelo y otra en su cintura, Jazmín hundía su lengua en la boca de Florencia. Dios, lo que había extrañado esos labios, y ese sabor. Jazmín sabía a felicidad. Esa era la unica palabra con la que Flor podía describir lo que estaba probando en ese momento. La atrajo a su cuerpo y siguieron con ese beso intenso, lleno de pasión y amor. Cuando tuvieron que separarse por falta de oxigeno, Jazmín apoyó su frente contra la de Flor y ésta le dejó un tierno besito en la nariz.

- No lo puedo evitar, te amo demasiado. - susurró Jazmín.

- Yo también te amo. Te amo mucho. Muchísimo.